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n medio de la crisis, el Ministerio de Salud a cargo de Sonia Velázquez definió una reunión de Gabinete para este miércoles. El objetivo es revaluar la política y priorizar gastos. Una de las primeras medidas que se divulgó este martes, a través de una resolución, es la suspensión de viáticos.

“Esto se suele hacer a fin de año pero se está haciendo ahora. También tiene que ver con la decisión política de dar un mensaje”, evalúan en los pasillos del Ministerio. Desde el área de Prensa de la cartera, se emitió un informe titulado “Salud define políticas para afrontar la coyuntura socioeconómica”.

La comunicación oficial fue después de una reunión que Velázquez presidió en Nogoyá con funcionarios del gabinete y directores y administradores de 11 hospitales de diferentes grados de complejidad (niveles 2A y 2B). “Lo que planteamos con estos encuentros es poder darnos una planificación ordenada que nos permita optimizar los recursos, porque lo peor que nos puede pasar es que nos tome esta crisis en un clima de desorganización”.

“Estamos trabajando en un plan de contingencia de Salud, evaluando no solamente las variables macroeconómicas que se han conocido en las últimas horas por la paridad cambiaria, sino también todo el ordenamiento que tiene que ver con los recursos”.

En este caso el Ministerio de Salud está a punto de poder transmitir, autorizar y ejecutar una normativa (mediante Resolución Ministerial) que establece un plan de contingencia para optimizar recursos y priorizar los insumos en función de la situación reinante.

“Estamos trabajando en un plan de contingencia de Salud, evaluando no solamente las variables macroeconómicas que se han conocido en las últimas horas por la paridad cambiaria, sino también todo el ordenamiento que tiene que ver con los recursos”

El texto legal, que están elaborando el Ministerio de Salud y su par de Economía y cuenta con el aval del gobernador Gustavo Bordet, prevé integrar a los subsectores privados y de seguridad social con algún tipo de bonificación; como así también instancias de cooperación con otras jurisdicciones (como pueden ser aquellas provincias que tienen laboratorios públicos de fármacos, a fin de asegurar la provisión de medicación esencial).

La provincia también sigue con atención la situación de las obras sociales nacionales, que están en retirada y el rol que ha tomado el PAMI, con el gradual vaciamiento que ha tenido esta obra social en cuanto a hacerse cargo de las obligaciones más elementales con los adultos mayores.

“La crisis social y económica impacta de lleno en los determinantes de la atención del proceso salud-enfermedad y no tenemos que escapar a esta situación”, recalcó Velázquez. Tras lo cual agregó: “No es que nosotros nos aislamos atendiendo a los ciudadanos y no entendemos cómo vive la población en este contexto; entendemos la Salud como un bien social, un derecho humano fundamental y, por lo tanto, para el gobierno de la provincia la agenda de salud está en primer lugar”, expresó.

“Cada uno ve en sus hospitales los efectos que tiene el modelo social y económico actual, que nos interpela fuertemente al sector salud”, señaló la ministra, no sólo por la caída del salario y lo que significa una fuente laboral menos, que al no tener cobertura de seguridad social tiene al hospital como único lugar de atención; sino también “por cómo han impactado los costos de los servicios, tanto eléctricos como otros de sustentabilidad esencial para la prestación hospitalaria, insumos alimentarios y el componente de farmacia”, completó.

“Esto traerá aparejado detener gestiones en marcha, como pueden ser una obra o la adquisición de equipamiento, no porque no los consideremos relevantes sino porque tenemos que priorizar y extremar todos los recursos y orientarlos hacia lo más básico que es atender la salud de la población”

Por lo tanto, y ante una nueva disparada de la cotización del dólar en las últimas horas, se instó a los responsables de los establecimientos sanitarios a cuidar los recursos y optimizar los procesos administrativos, privilegiando lo que hace a funcionamiento y a asegurar la disponibilidad de insumos y medicamentos.

“Esto traerá aparejado detener gestiones en marcha, como pueden ser una obra o la adquisición de equipamiento, no porque no los consideremos relevantes sino porque tenemos que priorizar y extremar todos los recursos y orientarlos hacia lo más básico que es atender la salud de la población”, sostuvo Velázquez; y completó: “Sobre todo porque, como ha pasado anteriormente, hay proveedores que deciden no cotizar ante el contexto de incertidumbre financiera, por lo tanto es primordial darnos las estrategias que nos permitan sostener la atención”.

El diagnóstico contable en foco

Uno de los ejes trazadores del encuentro fue el análisis administrativo contable del Ministerio de Salud. En ese marco la subsecretaria de Administración, Gabriela Diez, brindó precisiones respecto de los aspectos presupuestarios. Allí se indicó que, en principio y de acuerdo al presupuesto aprobado por ley para el ejercicio 2019, la cartera sanitaria dispondría de 11.553.990 millones de pesos; que ya debieron ser apuntalados con un refuerzo presupuestario (elevándolo a 11.853.000 millones). Cabe señalar que estos fondos se encuentran compuestos en un 91.2 por ciento por rentas del tesoro provincial, mientras que el 8.88 por ciento restante corresponde a rentas nacionales.

Además se informó que aproximadamente el 80 del presupuesto es afectado al pago de sueldos. También en materia de recursos humanos se destinan unos 140 millones de pesos anuales al pago de los residentes, y otros 332 millones en concepto de guardias médicas.

Por su parte el gasto de funcionamiento de hospitales insume 1.219.000 millones de pesos (lo que representa el 11.28 por ciento); y por subsidios a personas se erogan 129 millones de pesos; y se destinan 100 millones de pesos al banco de drogas oncológicas.