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l Frente Ciudadano, grupo peronista que ganó las elecciones en la ciudad de San José, en el departamento Colón, denunció que la administración vecinalista aumentó la planta de personal en los últimos días, con el nombramiento de 40 personas. Gustavo Bastian y Marisa Follonier, intendente y vice electos arremetieron contra la intendenta saliente, Irma Monjo y el senador provincial vecinalista Pablo Canali.

"De acuerdo a lo comunicado oficialmente por el COYEM a través de sus redes sociales, y confirmando esta información con integrantes de ATE, respecto del pase a planta permanente de 40 trabajadores municipales, nos vemos en la obligación de advertir a la comunidad los efectos negativos que esto pueda traer sobre las arcas municipales y sobre los proyectos que encare nuestro gobierno, a partir del 10 de diciembre", dijeron en un comunicado publicado en Facebook.

"Nunca, hasta el momento, en casi 12 años de gobierno vecinalista, se había hecho un pase a planta permanente de este tamaño; de modo que, intuimos, que el presunto 'Estado ordenado' y 'municipio con superávit' quedará solo en un cartel y no en una política de Estado que podamos continuar, aunque queramos "

En ese sentido, remarcaron que "el propio Pablo Canali cuando fue electo intendente en 2007, afrontando un tiempo de transición similar, un pase a planta permanente de este tamaño y en estas condiciones es, cuanto menos, irresponsable. Entendemos, como gobierno electo que, al menos debimos ser consultados o informados sobre esta cuestión por parte de la intendente actual, Irma Monjo".

"Como gobierno peronista entendemos la necesidad de los trabajadores de contar con la estabilidad laboral que ofrece la planta permanente. No obstante, que el gobierno saliente la realice, a sabiendas de que el pueblo no los ha elegido para continuar gobernando, sin convocar al gobierno entrante, es una falta grave y una contradicción a lo que ellos mismos han pronunciado", agregaron.

En esa dirección, recordaron que el legislador vecinalista presentó en abril pasado un proyecto de transición gubernamental sosteniendo que “es necesario dar un mensaje a la sociedad de que el Estado es uno solo y se deben brindar las garantías suficientes para que los traspasos de gobierno no generen inconvenientes en la administración”.

En ese proyecto, señalaron que el artículo quinto proponía: “Se dispondrá la auto restricción a la autoridad saliente para el nombramiento de personal, con excepción del necesario para tareas esenciales, previo consenso con la autoridad electa. La medida restrictiva será también aplicable para aquellos actos de gobierno que signifiquen un incremento del gasto municipal presupuestado”.

"Demás está decir que la maniobra del gobierno de Irma Monjo, no cumple en lo más mínimo con aquel proyecto que, en plena campaña electoral, presentó el excandidato a intendente Pablo Canali", manifestaron los dirigentes peronistas.

Además, plantearon su preocupación por "el impacto económico que esto pueda tener en el municipio, en el marco de crisis que se vive en el país, sumado a las re-categorizaciones previstas en los acuerdos paritarios y que aún no se han definido".

"Nunca, hasta el momento, en casi 12 años de gobierno vecinalista, se había hecho un pase a planta permanente de este tamaño; de modo que, intuimos, que el presunto “Estado ordenado” y “municipio con superávit” quedará solo en un cartel y no en una política de Estado que podamos continuar, aunque queramos.  Por otro lado, si existe un déficit en la Caja de Jubilaciones, nos gustaría como gobierno entrante ser parte de las decisiones que se tomen para sanearla. Un incremento de la planta permanente hoy, no constituye otra cosa que “pan para hoy, hambre para mañana”. Este gobierno ya ha echado mano al sueldo de los trabajadores para intentar sanear la caja pero al parecer no dio buenos resultados. ¿Quién garantiza que esto sí lo será?", completaron.