El gobierno entrerriano, a través del Ente Provincial Regulador de Energía, emitió un comunicado que afirma que los hogares de la provincia "no pagan la tarifa eléctrica más cara del país", contra lo que publicó un medio nacional.
E
n función a un artículo publicado este miércoles en La Nación, y que puede leerse completo en la sección Entre Ríos en los medios nacionales, de INFORME DIGITAL, el Ente Provincial Regulador de la Energía (EPRE) aclaró que el consumo promedio del 70 por ciento de la población entrerriana es de 225 kilowatts/hora por mes y explicó que la calidad del servicio y la distribución de la población por kilómetro cuadrado "son elementos fundamentales a la hora de la determinación del costo".
Por lo tanto, aseveró la comunicación del organismo entrerriano que "no es correcto comparar jurisdicciones utilizando los mismos parámetros".
El director de análisis normativo del EPRE,
Luciano Paulín, sostuvo: “el consumo promedio en la Provincia de Entre Ríos es
de 225 kWh/mes o 450 kWh/bimestrales. Dicha categoría incluye hasta el 70% de
los usuarios residenciales de la provincia, y la tarifa que se paga no es la
más cara del país para ese rango de consumo”.
“La comparativa publicada en dicho artículo (550 kWh/mes) se centra solo en una pequeña porción de usuarios de alto consumo (menor al 5%), que no son representativos del promedio de consumo de los hogares entrerrianos. Asimismo, tampoco indica la situación tarifaria del comercio, la industria y los servicios”. (ver debajo)
Asimismo, el funcionario aclaró que “no es correcto afirmar que todas las
distribuidoras eléctricas pagan a un mismo precio la energía a CAMMESA o que
cada jurisdicción paga lo mismo por la generación. Si bien la hoy subsecretaría de Energía Eléctrica de la Nación fija estacionalmente un costo de
compra de energía único para todas las distribuidoras del país, no todas pueden
afrontar el 100% del pago de dicho costo".
"Esto genera una manifiesta situación de desigualdad entre las distintas provincias, lo que se refleja en la tarifa final”, advirtió Paulín en el comunicado oficial enviado a INFORME DIGITAL.
El funcionario del Ente Regulador indicó que “la diferencia de
precios entre jurisdicciones se debe principalmente al costo propio de la
prestación de servicios en cuanto a la cantidad de usuarios por kilómetro
cuadrado (densidad poblacional). Este concepto es uno de los más importantes
para la determinación del costo de distribución y las tarifas, ya que para un
determinado costo total del servicio mientras entre más usuarios o energía se
reparta, más bajo será el costo unitario que se traslade a la tarifa final”.
“Cabe destacar que Entre Ríos tiene una de las mejores coberturas del territorio con servicio eléctrico y distribución de la población a lo largo y ancho de la provincia, lo que implica una baja densidad”, destacó Paulín.
En este sentido, Paulín puso el énfasis en “la calidad del servicio” que se brinda en la provincia y recordó que “en 2017 el tiempo medio de interrupción por usuario dentro de la provincia de Entre Ríos fue de 6 a 8 horas en el año, mientras que en el ámbito de la jurisdicción nacional fue de entre 28 a 38 horas”.
Finalmente, el Director de Análisis Normativo del EPRE concluyó: “Para hacer una correcta comparación tarifaria, debemos tener en cuenta no solo el precio final sino otras variables como: cantidad de usuarios, superficie del área de concesión, densidad de usuarios, kilómetros de líneas en las diferentes tensiones, potencia instalada, energía operada, calidad del producto, calidad del servicio, niveles de pérdidas, etc”.
Por último, el funcionario trazó otra comparación de índole nacional. “Según un informe publicado por el ex Ministerio de Energía y Minería de la Nación, el objetivo de calidad global para EDENOR y EDESUR sería logar para el año 2022 un nivel de horas de interrupción anual similar al actual de Entre Ríos, lo que demuestra el excelente nivel de calidad de servicio de nuestra provincia”, recordó.