Iba a marcar su gestión en la historia de la región. Debía licitarse en 2017 y Nación la postergó para 2018. Pero debido a la crisis financiera el presidente lo suspendió, junto a todas las nuevas obras de Participación Pública Privada.
P
or efecto de la suba del riesgo
país y el encarecimiento del crédito internacional, el gobierno de Mauricio
Macri frenó el programa de Participación Público Privada (PPP) para financiar obras
públicas y reconsiderará "nuevos criterios" de financiamiento. Entre los
proyectos que cayeron fruto del descontrol cambiario y sus consecuencias se
encuentra el puente Paraná-Santa Fe.
Si bien bajo esta modalidad los recursos los aportan los inversores privados -que luego recuperan con peajes y otros modos- las altas tasas de financiamiento con el aumento del riesgo país hacen actualmente inviable el negocio. Es por ello que los PPP se suspendieron hasta un mejor escenario macroeconómico. La noticia aún no fue confirmada por el gobierno pero se da por hecho en la prensa especializada en base a fuentes oficiales.
Si la situación macroeconómica mejora,
podría regresar la modalidad de los PPP. El cambio de criterio y el freno se
decidió este lunes entre el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne; y el asesor presidencial
Gustavo Lopetegui, quien contaba con el visto bueno de Mauricio Macri.
Hay que decir que las expectativas entre
paranaenses y santafesinos por la histórica megaobra de conexión vial fueron mutando
hacia el escepticismo: la licitación fue anunciada y re-anunciada varias veces,
incluso el puente fue incluido en el proyecto de presupuesto nacional 2019, y
nunca se acercó su realización concreta.
Desde 2016 distintos funcionarios del gobierno nacional y hasta el propio presidente Mauricio Macri habían indicado que el puente iba a ser licitado en setiembre de 2017, como parte de la tercera etapa de llamado a licitaciones. Ese plazo fue luego pospuesto para el semestre junio-noviembre de 2018.
"Hoy la obra pública dejó de ser un sinónimo de corrupción. Gracias a los ahorros a partir de licitaciones transparentes se ahorraron en el área de Transporte 32 mil millones de pesos. Ese dinero alcanza para construir el puente Chaco-Corrientes que tanto esperamos y el puente Santa Fe-Paraná”, había anunciado el presidente en su discurso de apertura del año legislativo el 1º de marzo de 2017.
Con los nuevos tiempos de las
licitaciones, Vialidad Nacional reorganizó las tres etapas de las obras PPP
para entre noviembre 2017 - abril 2018; febrero - julio 2018; y la última, en
la que debería haber estado incluido el puente, entre junio y noviembre de este
año.
La inversión prevista para el puente
Paraná-Santa Fe era de 650 millones de dólares en cuatro años, aunque se
estimaba que ese monto podría elevarse a 900 o 1.000 millones de dólares, y
otros 21 millones de dólares en obras complementarias, como la nueva
circunvalación de Paraná.
Promesa caída
Los PPP son la gran (y acaso única) apuesta del gobierno de Macri para mantener la obra pública con ritmo en 2019, cuando está previsto un feroz recorte de los gastos de capital del Estado nacional. Con aportes privados, la Casa Rosada preveía compensar el ajuste. Pero la crisis cambiaria y el escándalo de los cuadernos complicaron seriamente la viabilidad de los proyectos.
La crisis financiera elevó
fuertemente las tasas de interés para obtener financiamiento y el caso de los
cuadernos espantó a los bancos internacionales que habían comprometido fondos a
las empresas que ganaron los contratos. Es que varias de esas empresas quedaron
implicadas en la causa y por reglas internas los bancos no pueden otorgar
créditos a firmas vinculadas a casos de corrupción.
En septiembre, luego del descalabro cambiario, ya se advertía que por la suba del riesgo país los proyectos de PPP costarían 3.000 millones de dólares más de lo firmado. Y sólo teniendo en cuenta los ya licitados y adjudicados, es decir apenas la primera de las tres etapas. Ahora, la segunda y la tercera etapa directamente son suspendidas sin plazos de retomarse.