E

l Partido Justicialista conmemoró su fecha histórica sin lograr aglutinar a su variopinto arco de dirigentes nacionales en un mismo acto por el Día de la Lealtad que sintetice la mentada “unidad” que se pregona desde la mayoría de sus vertientes de cara a las elecciones 2019, cuando el “movimiento” tiene por delante la disputa contra la reelección del presidente Mauricio Macri.

Aunque durante la jornada no quedó clara la cantidad de actos con aspiraciones nacionales que se realizarían, las principales manifestaciones se dieron en Tucumán, con el gobernador Juan Manzur como anfitrión, y en la localidad de Merlo, provincia de Buenos Aires, gobernada por el presidente del PJ Bonaerense, Gustavo Menéndez.

Las otras movidas se dieron en Corrientes –hasta donde llegaban el presidente del partido a nivel nacional, José Luis Gioja, y el diputado nacional kirchnerista Agustín Rossi- y en Córdoba, donde se congregó uno de los ramales del movimiento obrero peronista, las 62 Organizaciones.

El mayor poder de gravitación lo mostró el ex ministro de Salud de Cristina Kirchner, Juan Manzur, en el Hipódromo de la capital tucumana. El cacique norteño hizo una demostración de fuerza porque busca subirse al vagón en el que vienen transitando el camino hacia 2019 otros referentes del peronismo “racional”, “dialoguista”, “sin prontuario”, entre otros calificativos de la jerga política.

Así se metería en el mando del pelotón que representan hasta el momento los gobernadores de Salta, Juan Manuel Urtubey, y de Córdoba, Juan Schiaretti –ambos lo desairaron con sus ausencias en la calurosa tarde tucumana-, junto con el líder del Frente Renovador, Sergio Massa, y el jefe del justicialismo en el Senado, Miguel Pichetto.

Cabe remarcar que la mesa chica de esta “Alternativa Nacional” –como bautizaron al incipiente armado- esperan el respaldo público del gobernador entrerriano Gustavo Bordet, quien hasta el momento no se sumó a ninguna foto ‘electoral’ del sector. Tampoco este miércoles, ya que fue uno de los caciques justicialistas ausentes.

En cuanto a las presencias, Manzur logró exhibir en el escenario a un abanico bastante amplio de dirigentes: Massa, Pichetto; la gobernadora catamarqueña Lucía Corpacci y su par riojano Sergio Casas; los vicegobernadores de Santiago del Estero, José Emilio Neder, y de Chaco, Daniel Capitanich; la titular del bloque de diputados del Frente Renovador, Graciela Camaño; el diputado del bloque Justicialista Diego Bossio; el referente sindical y reciente interventor (mandato cumplido) del partido, Luis Barrionuevo.

"Les pido a todos los compañeros a nivel nacional, sin excepción, el peronismo en el 19 tiene y debe ir unido. Debe ir unido", suplicó Manzur.

También estuvieron el ex candidato presidencial y hoy diputado nacional del Frente para la Victoria –electo por Unidad Ciudadana-, Daniel Scioli; el diputado salteño Pablo Kosiner - embajador de Urtubey en Tucumán y jefe de los diputados entrerrianos Juan José Bahillo y Mayda Cresto en Argentina Federal-; los referentes de Florencio Randazzo bonaerenses Eduardo Bucca y Florencia Casamiquela; y los triunviros de la CGT Héctor Daer y Carlos Acuña.

"Les pido a todos los compañeros a nivel nacional, sin excepción, el peronismo en el 19 tiene y debe ir unido. Debe ir unido", suplicó Manzur en su discurso.

El mandatario tucumano apuntó al gobierno de Mauricio Macri y sentenció: "miren lo que nos pasa con este modelo económico que implementa el gobierno nacional. Cada vez tenemos más pobres, más indigentes, están cerrando las fábricas, la desocupación está en dos dígitos”.

“Qué estamos esperando. Están fundiendo a los negocios, a las pymes, más del 70% las tasas de interés. A la gente no le alcanza la plata. No pueden pagar la luz, el gas, los colectivos para viajar. Qué estamos esperando los peronistas", arengó.

El kirchnerismo ni asomó por el conglomerado que celebró la Lealtad en Tucumán. Su núcleo duro se mostró en alianza con el PJ Bonaerense. Hasta el acto en el club Ferro de la localidad de la provincia de Buenos Aires (foto arriba) llegaron los líderes de La Cámpora Máximo Kirchner, Andrés Larroque, Mayra Mendoza y Eduardo De Pedro.

Por el lado de los ‘barones’ asistieron los intendentes Martín Insaurralde (Lomas de Zamora), Fernando Gray (Esteban Echeverría) Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas), Mariano Cascallares (Almirante Brown), Walter Festa (Moreno), Juan Zabaleta (Hurlingham), Gabriel Katopodis (San Martín) y Verónica Magario (La Matanza), Mario Secco (Ensenada), Francisco Durañona (San Antonio de Areco), Ariel Sujarchuk (Escobar), Gustavo Arrieta (Cañuelas) y Juan Ustarroz (Mercedes).

Allí el único orador fue Menéndez. "Todos los compañeros, los que se dicen herederos del peronismo, los que fueron a Tucumán, Corrientes, a Salta, son todos peronistas y tenemos que entender que los precisamos. La tarea que tenemos por delante es definitoria. El año que viene no se define solo una elección, sino vida o muerte”, sentenció el titular del peronismo de Buenos Aires (en la foto debajo).

INFORME DIGITAL registró que la única asistencia de dirigentes entrerrianos a los actos fue del diputado nacional de La Cámpora, Juan Manuel Huss, al mitín de Merlo. Antes el legislador difundió en las redes sociales que decidió pasar el Día de la Lealtad en el penal de Ezeiza, donde pasa sus días su compañero de bloque, Julio De Vido. “Visitando a los compañeros presos políticos del régimen neoliberal, quienes honran con su lealtad al Movimiento Nacional y Popular”, redactó.

En la provincia la conmemoración pasó centralmente por mensajes en el mundo 2.0.