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e la redacción de INFORME DIGITAL Se conocerá este lunes a las 12.30 el adelanto de sentencia que puede condenar por "corrupción de menores agravada por ser el encargado de la educación" al cura católico Justo José Ilarraz, procesado por ultrajes cometidos contra menores mientras era prefecto del Seminario de Paraná entre 1985 y 1993. El juicio comenzó el 16 de abril y contó medio centenar de testimonios. El tribunal está compuesto por los jueces Alicia Vivian –presidente–, Carolina Castagno y Gustavo Pimentel. En cuanto a los pedidos de las partes, el Ministerio Público Fiscal y las querellas particulares de las víctimas coincidieron en solicitar una pena de 25 años de prisión y que se dicte la preventiva para que el cura no se fugue. La Defensa del prelado, en tanto, pidió la absolución. La audiencia, que esta vez será pública -el juicio se desarrolló a puertas cerradas-, será transmitida por el Servicio de Información y Comunicación del Superior Tribunal de Justicia de la provincia. Se puede ver en vivo aquí: Ilarraz fue prefecto de Disciplina en el Seminario Menor de Paraná. Se le endilga haber corrompido a menores de edad entre 1985 y 1993, mientras fue acompañante y guía espiritual de los niños y adolescentes que entraban al Seminario para dedicarse al sacerdocio. Por aquellos años, el arzobispo era el actual cardenal Estanislao Esteban Karlic, quien al conocer algunos casos ordenó un sumario interno que concretó el abogado y sacerdote Silvio Fariña. En ese documento se tomó declaración a cuatro víctimas de Ilarraz. La investigación se desarrolló entre 1994 y 1995 y concluyó con una sanción para el cura. Ilarraz tuvo que irse de la Diócesis bajo promesa de no regresar. Viajó a Roma, donde hizo una Licenciatura en Misionología. Allí se sometió a pericias psicológicas y escribió una carta pidiendo perdón por un accionar que calificó de imprudente. A lo largo de las investigaciones y según testimoniales y documentación revelada durante el juicio cayó un serio manto de sospecha sobre la Iglesia paranaense por el encubrimiento del cura. Frente a los jueces Alicia Vivian, Carolina Castagno y Gustavo Pimentel pasaron más de 70 testigos, entre ellos las siete víctimas denunciantes y tres autoridades de la Iglesia Católica. Estos últimos declararon por escrito: Karlic, el arzobispo actual, Juan Alberto Puiggari, y el obispo de Concepción -Tucumán-, José María Rossi. (Análisis Digital)