N
o cesa la conmoción en Gualeguaychú, Entre Ríos, que aún sufre los coletazos del impactante caso de Nahir Galarza y Fernando Pastorizzo. Las últimas 72 horas tuvieron en el centro de la escena a Froilán Pedroza, de 44 años, agente de la policía provincial y parte de un cuerpo de elite de la Fuerza (Guardia Especial GEPER). Froilán Pedroza fue asesinado de un balazo en la cabeza tras un allanamiento en el marco de una causa por trata de personas en esa ciudad de entrerriana. El hecho ocurrió el viernes, su muerte ocurrió el sábado y el domingo fue despedido por una multitud. Todo esto sucedió mientras su mujer daba a luz el tercer hijo del matrimonio. Al mismo tiempo, de un paro cardíaco y como consecuencia de la herida recibida en el enfrentamiento con Pedroza, murió Washington Varela, el uruguayo autor de los disparos mortales contra el oficial de policía. El desenlace ocurrió anoche, en los primeros minutos de este lunes, en la Sala de Terapia Intensiva del Hospital Centenario, según informa el medio local El Argentino. Mientras Pedroza aún peleaba por su vida, en el Servicio de Neonatología del Hospital Centenario de Gualeguaychú se produjo el nacimiento por parto normal del hijo de la paciente Gabriela Frizzio. El bebé se llama Simón, nació de 30 semanas con un peso de 1,600 kilos, con una condición de prematuro. "Está siendo asistido con un método de respiración no invasiva y la médica pediatra en turno está atendiendo a su mamá y su hijo con monitoreo de sus signos vitales. Ambos pacientes están alojados en el sector de Cuidados Intensivos Neonatales del área de Maternidad del hospital", dijeron autoridades médicas al ese medio de Gualeguaychú. Pedroza y su esposa Gabriela ya eran padres de una nena de 9 años y un nene de 6.