E
n los diez primeros meses del corriente año el costo de vida acumuló un avance de 19,4% en el nivel general, un guarismo superior en casi dos puntos y medio porcentuales al techo previsto para todo 2017 por el Banco Central en su metas de inflación. De esta manera, la estimación oficial se ubicó en el mismo nivel que el IPC Congreso, realizado sobre la base de estimaciones de consultoras, y del el costo de vida para los trabajadores asalariados de Capital Federal y Gran Buenos Aires calculado por el Instituto Estadístico de los Trabajadores (IET). En septiembre, el IPC había aumentó un 1,9%, impulsado por el incremento en el rubro vestimenta e indumentaria, educación, alimentos y bebidas y vivienda y combustibles, con lo que acumuló un avance del 17,6% en los nueve primeros meses del año. Durante octubre, las mayores subas se anotaron en comunicación, por el alza de las tarifas de los teléfonos celulares, con el 5,3 por ciento; transporte, con 1,3 por ciento; indumentaria, con 2,1 por ciento, y salud, con 1,1 por ciento, que se ponderaron con el aumento de 1,5 por ciento en alimentos y de 3 por ciento en bebidas. El Indec informó también que los bienes con variaciones estacionales subieron 2,4 por ciento; los regulados ascendieron 1,7 por ciento, y la inflación núcleo se expandió 1,3 por ciento. Si esta misma comparación se hace sobre el acumulado del año, con una inflación del 19,4 por ciento, los bienes estacionales registran una suba del 19 por ciento; los regulados, que incluyen las tarifas de electricidad, gas y agua, aumentaron 25,3 por ciento, y el IPC núcleo acumuló un alza del 17,6 por ciento. Ahora, y tras subir la tasa de referencia de política monetaria dos puntos y llevarla al 28,25 por ciento, la inflación núcleo de octubre mostró un ligero retroceso al aumentar 1,3 por ciento.