E
l Gobierno arranca formalmente el debate por la reforma penal juvenil, que incluye la baja de edad de imputabilidad de 16 a 14 años. La primera reunión encabezada por el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Germán Garavano, tendrá lugar este jueves desde las 15 en la sede de la cartera, ubicada en Sarmiento 329. A la cita fue invitado Pablo Alejandro Barbirotto, juez Penal de Niños y Adolescentes de la provincia. Barbirotto es uno de los cinco magistrados del país que fue convocado por la Unicef para redactar una norma superadora del régimen penal de menores que rige desde la dictadura. En declaraciones recientes, Barbirotto sostuvo que “lo que se plantea ahora es la baja de la edad de punibilidad, es decir de aplicar pena, no de imputabilidad" y recordó que la comisión de unicef que integró "convino que no era conveniente bajar la edad de punibilidad porque una medida de ese tipo no tiene ninguna incidencia en la política criminal. Es ínfimo el número de delitos cometidos por chicos de 14 a 15 años. Quedó claro en el documento final que no era conveniente trabajar la baja de la punibilidad. Ahora lo tratan, y en un año electoral. Los años electorales nunca son buenos para tratar estos temas”. Del encuentro de este jueves participarán funcionarios del Poder Ejecutivo, integrantes del Poder Judicial y organizaciones de la sociedad civil, que comenzarán a delinear los ejes de una reforma que será plasmada en un proyecto de ley. El debate llegará al Congreso recién después de las elecciones legislativas de octubre, consignó Parlamentario. Entre otros, estarán presentes este jueves la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich; el ministro de Justicia bonaerense, Gustavo Ferrari; representantes de la cartera de Desarrollo Social que encabeza Carolina Stanley y del Sedronar, así como jueces y fiscales, y organizaciones sociales como Unicef, que ya confirmó su participación. Con voces a favor y en contra, la discusión se reavivó tras la muerte del joven Brian Aguinaco en manos de otro joven de 15 años. Si bien hubo varios intentos legislativos para modificar el Régimen Penal Juvenil –incluso una media sanción del Senado en 2009-, la ley no pudo prosperar en el Congreso, y ahora el Gobierno espera volver a dar el debate.