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a mitad de los argentinos con ingresos percibe menos de 8000 pesos mensuales. Así lo reveló el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) en su informe sobre distribución del ingreso correspondiente al tercer trimestre de 2016 elaborado a partir de los datos de la Encuesta Permanente de Hogares. Según el organismo, nueve de cada diez argentinos con ingresos tiene menos de 22.500 pesos de ingresos mensuales; el 20 por ciento más rico se apropia del 48,4 por ciento de la renta. Esto implica una diferencia de 25 veces, equivalente a un 2500 por ciento. Según el organismo, los cinco deciles de menores ingresos comprenden a 8,2 millones de personas, que perciben mensualmente un ingreso inferior al salario mínimo vital y móvil, que en septiembre se ubicaba en 7560 pesos y desde enero subió a 8060 pesos. En conjunto, ese 50 por ciento de la población con menos ingresos se lleva un 20,5 por ciento de la torta general. La desigualdad en la distribución del ingreso en la Argentina se refleja al observar el otro extremo de la pirámide. Según el Indec, el 10 por ciento de la población de mejor nivel económico (perciben entre 22.500 y 274.000 pesos al mes) se lleva el 31,5 por ciento del ingreso total. En tanto, si se consideran los dos deciles más altos (incluye a quienes ganan más de 15.900 pesos), la participación sobre el total asciende al 48,4 por ciento. Asimismo, el informe del organismo que conduce Jorge Todesca informó que, al tercer trimestre de 2016, había en el país 10,8 millones de personas que no percibían ingresos. Son 177.000 menos que a fines del segundo semestre. Otro de los datos difundidos por el Indec tiene que ver con el ingreso a nivel familiar. Según estos datos, también correspondientes al tercer trimestre de 2016, la mitad de los hogares más pobres en la Argentina tiene ingresos que no superan los 15.700 pesos por mes, consignó La Nación. Este conjunto, que comprende a un universo de 11,9 millones de personas, se apropia del 22,8 por ciento de los ingresos totales. Al comparar los extremos, a nivel ingresos familiares, se observa que el 10 por ciento más pobre (hasta 5828 pesos mensuales) se apropia del 1,9 por ciento del ingreso total, mientras que el 10 por ciento más rico (aquellas familias que perciben entre 41.250 y 280.000 pesos al mes) concentran el 29,1 por ciento de los ingresos.