E
l tratamiento del proyecto de gastos y recursos se realizará en forma conjunta con la iniciativa que forma la ley de Administración Financiera que establece un tope del 7,5 por ciento del gasto previsto total para la reasignación de recursos de parte del Poder Ejecutivo -en base a los superpoderes- sin necesidad de pasar por el Parlamento. En la misma sesión especial que comenzará cerca del mediodía de este miércoles, los diputados buscarán sancionar el proyecto de asociación pública-privada para atraer inversiones para obras de infraestructura que había sido votado por el Senado. Esta norma, como sufrió modificaciones respecto al proyecto votado por la Cámara alta, deberá volver en segunda revisión al Senado. Una de las modificaciones centrales del proyecto fue la incorporación de una figura por la cual en cada contrato las empresas nacionales deberán tener una participación del 33 por ciento, y la obligación de que cada obra esté contemplada en el presupuesto o se apruebe por una ley. La intención del oficialismo es debatir las tres iniciativas en forma conjunta y cerca de la madrugada votar para cada uno de los proyectos considerados "centrales" para el gobierno nacional, para lo cual ya tiene asegurada una mayoría de votos positivos junto al bloque justicialista y el massismo. Para construir este acuerdo fue clave el consenso alcanzado entre el gobierno nacional y los mandatarios provinciales, que se verán beneficiados con una prórroga del vencimiento del capital de sus deudas por dos años, una partida especial de 5.000 millones de pesos que se destinará a fondo sojero que se transferirá en forma automática en un 70 por ciento a las provincias y un 30 a los municipios. Pero el oficialismo no solo contará con el aval del Frente Renovador, y el bloque justicialista que lidera Diego Bossio, sino de varios diputados del FPV como el presidente del PJ José Luis Gioja, quien firmó el dictamen de mayoría en disidencia parcial, con lo cual marcó las diferencias que mantienen con los ultra k y la agrupación "La Cámpora". El dictamen del presupuesto mantuvo las pautas macroeconómicas que contemplan un aumento de 3,5 por ciento, una pauta inflacionaria del 17 por ciento, un dólar a 18 pesos, un déficit del 4,2 por ciento y una deuda estimada en $ 247.000 millones, con un gasto global de 2.363.619.870.574 pesos.