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l presidente de la Federación Médica de Entre Ríos (Femer), Rodolfo Nery, explicó a "a principios de mes les notificamos a las obras sociales – la mayoría son nacionales – que teníamos estudiado un coseguro que no estaba previsto en el convenio ni plasmado en papel", y por esa razón el paciente, cuando concurría al médico, "no sabía el valor que debía abonar". Esa omisión entre las partes – profesionales y obras sociales –, explicó Nery, llevó a que se tomara "como un plus que se cobraba y no estaba claro, más ahora que, con la nueva ley, se tiene que dejar todo por escrito". En declaraciones radiales que reprodujo Diario Río Uruguay, Nery precisó que "durante este mes" la FEMER invitó a las obras sociales a renegociar los convenios, en algunos por retrasos en los pagos pero en la mayoría "por el tema de clarificar" el coseguro, que se le aclare a la gente "lo que tienen que pagar". Cuando se le consultó al titular de la FEMER los motivos por los cuales hasta el presente no se "blanqueaban" los costos del presunto coseguro, explicó que "habitualmente estaba avalado" pero lo que pasaba es que "no sale impreso y la gente cree que el médico le está cobrando un plus". La idea es que de ahora en más "quede escrito, así la gente sabe lo que se le está cobrando por las prácticas, consultas o por las internaciones", puntualizó Nery. Coseguro congelado en 4 pesos Sobre los actuales valores a pagar, el galeno ilustró que el Programa Médico Obligatorio (PMO) – que contempla un conjunto de prestaciones médico-asistenciales – "autoriza a cobrar 4 pesos el coseguro y eso nunca se actualizó". "Ahora la consulta aumentó, pero los montos no se actualizaron y no tenía sentido; entonces se firmó un acta complementaria en donde se autoriza a cobrar valores de 50, 70 o 100 pesos", agregó. Por último, Nery adelantó que la decisión de reconocer el coseguro correrá bajo la exclusiva responsabilidad de las obras sociales, que deberán resolver "si se lo cobran directamente al afiliado o no", afirmó. Nery desestimó que las obras sociales resuelvan rechazar la renegociación de los convenios. "No es la cuestión, si es una práctica común: dos veces al año charlamos con las obras sociales", dijo. "Estas negociaciones incluso se dan vía mail, lo que marcó un poco la diferencia es que se tengan que plasmar en el convenio", puntualizó.