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a justicia federal de La Plata concedió esta tarde el arresto domiciliario al ex comisario Miguel Etchecolatz, con seis condenas por delitos de lesa humanidad y genocidio durante la dictadura cívico militar y principal sospechoso de la desaparición de Jorge Julio López en 2006. La medida no se efectivizará por una decisión de primera instancia que le impide al represor tener ese beneficio. La decisión del Tribunal Oral Federal 1 de La Plata, que ya hace un mes había fallado en el mismo sentido en otra causa contra Etchecolatz, se dio pese a que dos dictámenes del Cuerpo Médico Forense (CMF) confirmaron que las patologías del genocida pueden ser tratadas en el Hospital Penitenciario de Ezeiza. Guadalupe Godoy, abogada de la familia de Julio López, afirmó que la decisión "se enmarca en lo que en estos meses hemos tenido en materia de los juicios" y en la conducta adoptada desde el Gobierno de Mauricio Macri respecto a las políticas de Memoria, Verdad y Justicia. "Estamos dolidos, no sorprendidos", agregó la letrada en declaraciones a C5N. Godoy afirmó que la decisión será apelada, pero arriesgó que luego de todas las instancias "el resultado final va a terminar siendo el otorgamiento definitivo de la prisión domiciliaria" a Etchecolatz. "Lo que se pretende es llevar adelante la estrategia de los genocidas, que hagamos juicios pero con ellos mirándolos desde el living de su casa", completó.