U
n nuevo actor promovió un recurso de amparo contra el aumento de la tarifa eléctrica: la empresa que administra el Hotel Mayorazgo y cuatro salas de juego en Paraná pidió en la Justicia que no se aplique el nuevo cuadro tarifario. La medida fue acogida por la Justicia y, en principio, el juez suplente Eduardo Elías Flores hizo lugar a una medida cautelar para evitar el corte del suministro mientras se tramita el reclamo. El recurso de amparo fue promovido por la empresa Neogame SA ante el Juzgado del Trabajo Número 2 de Paraná, donde señaló que la aplicación del nuevo cuadro tarifario de la energía eléctrica le significó un incremento del 119,29% respecto de la facturación aplicada por la distribuidora estatal Energía Entre Ríos SA (Enersa) hasta diciembre del año pasado. Por lo pronto, el juez Flores hizo lugar este domingo a una medida cautelar y ordenó a Enersa no interrumpir el servicio eléctrico al hotel ni a las salas de juego que administra Neogame SA, mientras se tramita un amparo que procura dejar sin efecto el último aumento tarifario de principios de año. En la resolución, el magistrado dispuso que "Enersa deberá abstenerse de proceder a la interrupción por la eventual falta de pago del importe correspondiente al consumo que hiciera el actor (?), proceder al reajuste de la facturación del consumo, a los cuadros tarifarios existentes al 31 de diciembre de 2015, como previo a exigir su pago bajo apercibimiento de corte". La empresa Neogame SA administra desde el año 2007 el hotel del Parque Urquiza, y también cuatro salas de juego con máquinas tragamonedas y ruletas electrónicas en Paraná, y otra sala en Diamante, consignó El Diario. Según consignó la empresa en el escrito presentado ante la Justicia, "durante los últimos años, el consumo periódico de energía eléctrica ha sido relativamente similar, obviamente, considerando las diferentes estaciones y meses del año, esto se debe, principalmente, a que se mantuvo un nivel o porcentaje de ocupación y de visitantes parecido o estable", con la salvedad de que "el sector hotelero tiene esporádicamente algunos picos" y "que ha sufrido períodos prolongados de muy baja ocupación". Asimismo, se quejó la empresa de que "Enersa cobró una tarifa por el suministro de energía hasta el 31 de diciembre de 2015, otra superior a partir del 1º de enero de 2016 y otra, excesivamente mayor, a partir de febrero y marzo de 2016" y no dudó en calificar a los incrementos del costo de la energía eléctrica como "exorbitantes", "desmedidos", "irrazonables", "abusivos", "injustos" y "nada transparentes", en distintos tramos del texto. De allí que la empresa que administra el hotel pidió la reliquidación de sus consumos a los valores vigentes a diciembre de 2015 y, como medida cautelar, pidió que se ordene que la distribuidora no suspender el servicio por falta de pago. A la vez, solicitó que se dicte la nulidad de las resoluciones dictadas por el Ente Provincial Regulador de la Energía (EPRE) que sostienen legalmente los últimos aumentos de la tarifa eléctrica.