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n el marco del debate sobre la restitución del 15% de coparticipación federal de impuestos que las provincias ceden desde 1992 a la Nación para el sostenimiento de la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses), el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf) difundió un informe que analiza el impacto de esta medida en las cuentas provinciales. Según lo que acordaron los gobernadores con el ministro del Interior Rogelio Frigerio, durante este año se disminuiría el descuento en tres puntos porcentuales (es decir al 12%) y así sucesivamente hasta eliminarlo definitivamente en 2020. Todo depende de la aprobación de la Ley Ómnibus, en la que el oficialismo 'empaquetó' coparticipación, pago de juicios a jubilados y blanqueo de capitales. El análisis arroja la conclusión de que la devolución parcial no alivia significativamente las finanzas entrerrianas. El informe utiliza dos parámetros para calcularlo: la comparación entre los fondos previstos para ser restituídos con la recaudación del impuesto provincial de Ingresos Brutos, por un lado, y con el stock de deuda que mantiene la provincia con la Nación. En cuanto al primer cálculo, para Entre Ríos el impacto de los tres puntos que se dejarán de descontar este año equivalen al 12,9% de la recaudación de Ingresos Brutos. Respecto del segundo, los tres puntos previstos para este año representan aproximadamente el 24,3% de la deuda con la Nación. En pesos, se trataría de unos 600 millones para este 2016, un tercio de lo que paga mes a mes de sueldos la administración de Gustavo Bordet. Las principales urgencias financieras del gobierno provincial, y por lo tanto los eventuales destinos de la devolución de Nación, fueron desarrolladas por INFORME DIGITAL luego de consultar fuentes especializadas del Ejecutivo entrerriano. Ingresos Brutos provinciales En principio, el informe advierte que la resignación de la coparticipación resulta creciente en función de los diferentes grados de autonomía que presentan las provincias. Por ejemplo, en aquellas provincias con bases tributarias débiles (por menores niveles de actividad económica), el total de lo que se resigna por coparticipación en un año equivale a entre dos y tres veces la recaudación de Ingresos Brutos (IIBB), el principal impuesto en nuestras provincias. Lo opuesto ocurre en provincias de mayor nivel de actividad económica, y por tanto mayor autonomía fiscal, en las que el impacto de la resignación de fondos equivale a entre un 50% y un 25% de la recaudación del principal impuesto provincial. En el caso de Entre Ríos, que está en el 15º lugar de este ranking, el 14,3% resignado equivale a un 64,2% de lo que recauda por Ingresos Brutos, como puede verse en el primer cuadro del documento insertado en esta nota. En efectivo y en deuda con Nación Otro cálculo relevante del informe del Iaraf, que reprodujo el diario UNO, es cuánto implicaría en 2016 para cada provincia la restitución de cada punto porcentual de este 15%. Cada punto de la coparticipación equivale al 8% del stock de deuda que la provincia mantiene con la Nación, por lo que la devolución de 3 puntos prevista para este año llega al 24% del endeudamiento. Contando en millones de pesos, las conclusiones no son demasiado diferentes de lo ya dicho. Descontando los 11 millones que la Provincia debe enviar a los municipios, lo que tendrá este año de mayor coparticipación serían unos 600 millones de pesos. Representan un tercio de la masa salarial que paga mes a mes la administración de Gustavo Bordet a trabajadores activos y pasivos provinciales. El informe del Iaraf