L
a intención del ministro Alfonso Prat Gay de retrotraer a noviembre los precios se tomó con un primer desafío bravo: La Serenísima y criadores de pollos, dirigidos por un entrerriano de peso en la formación de precios en la rama industrial, directamente anunciaron que se bajan del programa Precios Cuidados de manera unilateral. Es el primer desafío fuerte de sectores empresarios al presidente Mauricio Macri y se concretan el mismo día que se anunció la eliminación de las retenciones al maíz, trigo y carne y baja de cinco puntos para la soja. Los criadores de pollos fueron un aliado férreo del kirchnerismo. El conductor de la Cámara de Empresas Procesadoras Avícolas (CEPA) es el empresario Roberto Domenech, de excelentes vínculos con el ex gobernador de Entre Ríos Sergio Urribarri y la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner. “Nosotros estamos realmente muy satisfechos y orgullosos de lo que el sector ha podido desarrollar en estos últimos trece años", solía decir Domenech en las exposiciones a las que se lo invitaba desde el gobierno provincial. "Hace 20 años que soy presidente de Cepa, y he recibido siempre el apoyo para con el sector por parte del estado entrerriano y nacional, pero en este último tiempo debo destacar un respaldo muy grande para el sector", valoraba el criador de pollos. El industrial es miembro del Comité Ejecutivo de la COPAL y de la Junta Directiva de la UIA. En 2002 y 2003 fue Subsecretario de Políticas Agropecuarias y Alimentos de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentos de la Nación durante el gobierno de Duhalde y recientemente fue anunciado como candidato a ministro de Asuntos Agrarios del frustrado proyecto de gobierno bonaerense de Aníbal Fernández. Desafío industrial Sorprendió y pegó fuerte de la Casa Rosada, a su vez, la decisión anunciada de La Serenísima, conducida por la multinacional francesa Danone, pero a la que recientemente se sumó el dueño de Arcor, Luis Pagani, que se suponía era uno de los aliados claves de Macri. De hecho, fue Pagani quien le sugirió al presidente el nombre de su lobbysta Jorge Lawson para que lo designe ministro del Interior. El desafío no podría ser más inoportuno. Macri y su equipo económico están tratando de calibrar al máximo los efectos de la inminente devaluación y quieren acotar los efectos sobre la inflación que el propio presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, reconoce que podría tocar el techo del 40 por ciento en el 2016, para luego iniciar un camino descendente, si funciona la política de metas que quiere aplicar Prat Gay. Es por eso, indicó La Política Online, que el ministro de Hacienda y Finanzas anunció que continuará por un tiempo indeterminado el plan Precios Cuidados, que ahora está a cargo del nuevo secretario de Comercio Interior, Miguel Braun, y por arriba suyo el ministro de Industria, Francisco Cabrera, a quien dos sectores muy poderosos y de impacto pleno en la canasta básica acaban de plantear un desafío mayúsculo. Lo que temen en el entorno de Macri es que esta rebelión desate una puja de todos sectores económicos por recuperar la rentabilidad perdida, que complique el desarrollo de un programa económico que tiene la delicada tarea de pasar de un economía con precios reprimidos a sus sistema de libre mercado.