E
ste miércoles a partir de las 14 se producirán nuevas declaraciones testimoniales en el marco de la investigación penal que pretende dilucidar la responsabilidad del cura Justo Ilarraz, por las denuncias de abuso sexual efectuadas por un grupo de exseminaristas en un hecho que sacudió a la Iglesia local y conmovió a la opinión pública. Luego de los pliegos con interrogatorios enviados tanto por los abogados de la querella, la Fiscalía y la defensa a los prelados Puiggari, Maulión y Karlic, ahora la jueza subrogante a cargo de la causa, Paola Firpo, moverá nuevamente el tablero con el propósito de esclarecer el episodio, en donde hasta el momento el mayor aporte ha sido el de las siete víctimas que relataron con certeros detalles las vejaciones a las que fueron sometidas. Una larga lista de sacerdotes integra la nómina que deberá comparecer por primera vez en sede judicial. La jueza actuante citó a Eduardo Jacob, actual rector del Seminario Arquidiocesano Nuestra Señora del Cenáculo. Como dato elocuente se debe recordar que el religioso fue alumno de Ilarraz y además declaró en la investigación diocesana ordenada en 1995 por el entonces arzobispo Estanislao Esteban Karlic. Se considera que este será uno de los testimonios claves, por el cargo que actualmente ocupa el padre Lalo y porque fue uno de los testigos durante la investigación “puertas adentro” que impulsó la curia local. Jacob había reemplazado al padre Mario Haller en ese cargo a principios de 2013, en lo que fue el principio de una serie de nombramientos propiciados por monseñor Juan Alberto Puiggari. Bedeles de las víctimas Según la definición de la Real Academia Española, el término alude a la persona, en los centros de enseñanza, cuyo oficio es cuidar del orden fuera de las aulas, además de otras funciones auxiliares. A esa función estaban abocados los sacerdotes Alfonso Dittler y José Balcar, quienes también fueron convocados para testimoniar. En 1996 prestaron declaración en la investigación diocesana. En ese momento, con sus dichos incriminaron a Ilarraz, al decir que tenía conductas desordenadas. Otro de los que también deberá pasar por Tribunales será Gustavo Mendoza, sacerdote que fue alumno del imputado. Además trascendió que el cura Néstor Pucheta también resultó citado, pero no podrá cumplir con ese cometido porque fue imposible dar con su paradero. Plazo de 10 días El 12 de diciembre expira el plazo para que los prelados Estanislao Karlic, Mario Maulión, Juan Puiggari y Silvestre Paul, respondan a los pliegos con interrogatorios enviados por la Justicia, donde se tramita la causa N° 52886, caratulada Ilarraz, Justo José s/Promoción a la corrupción agravada. Una vez respondidos, los obispos deberán remitirlos al Juzgado de Transición Nº 2. Además, la jueza Paola Firpo recordó a las partes que se encuentra vigente la resolución de fecha 22 de noviembre de 2012, tomada por el anterior juez del organismo, Alejandro Grippo, en cuanto a que las partes se deben abstener de dar información detallada de la causa, en atención a las particularidades que la misma presenta. Los curas que ya declararon Previamente otros representantes de la Iglesia habían declarado. Los testimonios de José Doumolin y Leonardo Tovar comprometieron aún más la situación procesal de Ilarraz. Tovar, párroco de San Benito Abad, tras declarar como testigo dijo públicamente: “Sería una pena que esta causa se caiga porque estamos ante un hecho aberrante y muy triste”, publicó Uno.