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a petrolera presentó este martes en Puerto Madero un “combustible inteligente” llamado Infinia, que formará parte del segmento Premium. Sin embargo, la movida no es más que un cambio de etiquetas para dar un nuevo tarifazo y poder llevar la nafta a $15. Actualmente, el litro de mayor octanaje se paga en Capital Federal a unos 13,50 pesos, pero en varias provincias se consigue por una cifra más alta por los mayores costos de distribución. Es decir que el incremento de YPF será del 11%, a pesar de que el comunicado difundiendo el lanzamiento de Infinia no especifica a cuánto se venderá el flamante "combustible inteligente". La estrategia de las petroleras consiste en usar al segmento "Premium"-que no difiere en gran medida de las otras naftas- para aplicar más subas en el precio del fluido. De todas formas, la petrolera controlada por el gobierno seguirá sin ser la más cara del mercado. Por caso, Axion y Shell venden la Premium a $16 el litro. El resto de las naftas se venden a un promedio de U$S1,25 el litro(al tipo de cambio oficial), lo que significó un fabuloso negocio para las petroleras, a las que el Presupuesto habilita a importar un millón de metros cúbicos a una tasa subsidiada y, para colmo, sin pagar ningún impuesto. Según publicó La Nación, esto les habría permitido a las compañías del sector hacerse de unos U$S388 dólares por metro cúbico muy por encima de lo que se gana si lo que se vende es combustible nacional. En un principio, esta operación no era negocio para las empresas del rubro, pero con los aumentos de nafta de los últimos años, sobre todo los que vinieron a partir de la expropiación de YPF y la devaluación, se fue convirtiendo en una ganancia cada vez mayor.