L
a polémica comenzó con un reportaje al senador y candidato presidencial publicado en la edición del viernes del diario Ámbito Financiero. Allí, Sanz reconoció que el Grupo Clarín tiene una posición dominante, y adelantó que si fuera presidente pondría "en funcionamiento el Tribunal Nacional de Defensa de la Competencia y aplicaría la ley en toda y cada una de las actividades y en todos y cada uno de los rubros en los que haya situaciones de dominio". Sin embargo, horas antes, en un reportaje que le hicieron en el programa Código Político de TN, aseguró que revisaría "la adecuación forzada" del multimedios a la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual". "Si nosotros llegamos a ser gobierno, este tema de la adecuación forzosa y todas las otras (leyes) que van saliendo de forma antinatural, como el Código Civil, como la Ley de Autoabastecimiento que es autoritaria e inconstitucional, como la Ley de Hidrocarburos que va en contra de los intereses del país y del federalismo… Todas esas cosas las vamos a revisar, las vamos a derogar, las vamos a anular y vamos a volver a la normalidad institucional en un país que está enfermo de anormalidad", aseguró Sanz. Luego de que el senador radical amenazara con "revisar, derogar y anular" varias de las leyes de la "era kirchnerista", el gobernador de Entre Ríos y precandidato presidencial, Sergio Urribarri, dijo: "Lo que dice Sanz, es la muestra de lo que piensan los candidatos del pasado. Quieren sepultar todos los programas de inclusión y leyes a favor de la democratización y el libre acceso a la cultura, al deporte y a la información que benefician a millones de argentinos, destruyendo la base social que se ha construido en estos 11 años. Sueñan con volver al país de unos pocos. El sueño de ellos es la pesadilla del pueblo". Y agregó: que “Sanz no sólo perdió el norte, sino que nada heredó de la inteligencia y la sensibilidad popular de respetados dirigentes de la UCR como Ricardo Balbín y Raúl Alfonsín. Por el contrario, el senador es apenas un eco de aquellos que llevaron a Domingo Cavallo al Ministerio de Economía y a millones de argentinos a la ruina”. El radical también recibió cuestionamientos de otros dirigentes oficialistas como el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich y el diputado y secretario de La Cámpora, Andrés “Cuervo” Larroque.