L
uego de la polémica por la sanción del nuevo Código Civil y Comercial, la Cámara de Diputados se prepara para tratar la semana que viene otro de los proyectos fuertes del año: el último Presupuesto de la gestión de Cristina Kirchner. El Frente para la Victoria convocará a una sesión especial para el próximo miércoles al mediodía con el fin de darle media sanción al proyecto y girarlo al Senado para su aprobación definitiva, que por su mayoría numérica ya tiene garantizada. La oposición –que en esta oportunidad sí participará del debate- ya criticó en duros términos, durante el debate en comisión, la iniciativa del Poder Ejecutivo, a la que volvió a tildar de “dibujo”. Además de cuestionar las previsiones macroeconómicas, la UCR, el FAP, el Frente Renovador y el Pro advierten sobre la vigencia de los superpoderes, que le permiten al Ejecutivo reasignar partidas, sin pasar por el Congreso. Por eso, se espera que el Presupuesto sea aprobado en la Cámara baja, una vez más, sólo con los votos del Frente para la Victoria y sus bancadas aliadas. Los números El Presupuesto para el año próximo prevé una inflación de 15,6 por ciento y un dólar a 9,45 pesos, además de un crecimiento del 2,8 por ciento, con crecimientos tanto del consumo como de la inversión. Según las estimaciones oficiales, habrá un superávit comercial de 9.197 millones de dólares. La recaudación tributaria sería en 2015 un 28,1 por ciento superior a la estimada para este año, ya que sería de casi un millón 500 mil millones de pesos. De ese total, el 22,4 por ciento corresponde a impuesto a las Ganancias; el 27,7 por ciento al IVA y el 25,4 por ciento a los aportes de contribuciones de la seguridad social. Otro 10,6 por ciento se deriva del comercio exterior y un 6,6 por ciento del denominado “impuesto al Cheque”, entre otros. Más de la mitad de los gastos de la gestión de gobierno estarán destinados a servicios sociales: un 58,7 por ciento. El resto se divide en “servicios económicos“ (21,9 por ciento), “administración gubernamental” (6,2 por ciento) y “servicios de defensa y seguridad” (5,5 por ciento). Pero además, un 7,7 por ciento de los gastos estará dirigido a solventar la deuda pública. El Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social es, por lejos, el que más partidas recibirá: un 36,5 por ciento. Le siguen Planificación Federal (12,2 por ciento), Desarrollo Social (5,5 por ciento) y Educación (4,8 por ciento), entre las certeras con más presupuesto.