L
a ley, sancionada el 8 de marzo de 2007, establece que no se permitirá a las empresas radicadas en la provincia de Entre Ríos la venta de rollizos o chips, en forma directa o indirecta, a las industrias establecidas o que se establezcan en la República Oriental del Uruguay, cuya finalidad es la producción de pasta celulósica con procesos químicos o semiquímicos. Desde ese momento a esta parte hubo una serie de intentos de rever la norma, a pedido de algunos sectores empresarios vinculados a la madera que argumentaban sentirse perjudicados por ésta. El último intento fue el martes 19 de agosto pasado, cuando hubo una reunión entre el diputado provincial y precandidato a gobernador Marcelo Bisogni y representantes de la Regional Río Uruguay de la Asociación Forestal Argentina (AFOA), en la que los empresarios le plantearon la necesidad de revisar la Ley de la Madera porque “atenta contra las inversiones y la generación de trabajo en la actividad” y afirmaron que la provincia “tiene una legislación restrictiva para el desarrollo foresto-industrial”. Por su parte, Bisogni coincidió con la entidad que nuclea a empresarios del sector y sostuvo: “Es necesario analizar en profundidad el tema en cuanto a que restringe a un sector de la industria y esto impone limitaciones a la generación de empleo, por lo que deberemos trabajar para ver posibilidades de revertir esta realidad, ya que no hay que olvidar que esta ley obedeció a un momento político particular de la provincia estrechamente vinculado al conflicto por la instalación de las pasteras”. Ante esto, la Asamblea Ambiental de Gualeguaychú abordó el tema en la reunión del miércoles pasado y lo volverá a hacer el que viene: “Ahora parece que quieren poner en jaque a la ley y pretenden reformarla”, sostuvo Veronessi. “Vamos a oponernos totalmente a una reforma que implique tanto la explotación como la salida de madera de Entre Ríos”, aseveró. Por otra parte, consultado por Apf acerca de la postura de la Asamblea Ambiental sobre el inicio del dragado del Río Uruguay, dijo que “en principio, cualquier dragado favorece a Botnia, que va a poder ingresar y sacar mercadería con más facilidad”. No obstante, Veroenessi aclaró que el tema todavía no fue abordado por la organización ambientalista a la que pertenece y adelantó que posiblemente el tema se debata en la próxima reunión.