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l sindicato de trabajadores hoteleros y gastronómicos demandó a la concesionaria de las termas de Concordia, Verter S.A., en reclamo de una deuda por aportes a la obra social y contribuciones que rondaría los 600 mil pesos. “Nuestra preocupación es que la empresa sigue funcionando y sigue generando deuda. A lo largo del tiempo se ha ido estirando y ha llegado a una cifra que hoy presentamos directamente ante la justicia porque ya no hay otra vía, se nos cerraron todos los caminos”, expresó a diario Noticias Julio Roh, Secretario General del gremio. La Municipalidad fue notificada del incumplimiento de su concesionario. La conducción local de la Unión de Trabajadores Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (UTHGRA) asumió hace menos de un año. “Cuando ganamos y asumimos encontramos un preocupante déficit en cuanto a las deudas que las empresas tenían con el sindicato, retenciones que se le hacen a los trabajadores que no llegan a la obra social, al fondo de convenio, seguro de vida y la cuota sindical”, sostuvo Julio Roh, Secretario General de UTHGRA. El radio de acción de la regional con sede en Concordia abarca desde el puente Zárate Brazo Largo hasta el límite con Corrientes, incluido Villaguay. “A lo largo de la costa tenemos empresas que deben una cantidad importante de dinero. La situación económica que estamos pasando no es la mejor y el sindicato, sobre todo la obra social, necesita seguir dando servicios”. Explicó en declaraciones que algunas empresas del sector no hacen los aportes que corresponde y así “se genera una deuda que con el paso del tiempo va creciendo y después se hace impagable”. Tras la asunción, su equipo de trabajo se abocó a buscar “empresa por empresa, encontramos que hay mucho dinero que nos están debiendo, entonces empezamos con las gestiones, sobre todo con las empresas que adeudan una cifra importante”. Informó que la deuda total alcanzaría los $3.500.000 “Para nosotros es una cifra muy importante. Pertenece a la obra social, servicios sindicales que podemos llegar a prestar y que hoy no lo podemos hacer porque esas empresas no están pagando”, apuntó. Con ese trasfondo, enviaron inspectores para incrementar los controles, gente del área gremial visitó empresa por empresa tratando de “entablar un diálogo para ver de qué forma se cobra, por ejemplo, con facilidades. Hay empresas que se arrimaron y otras que ni nos atendieron”. Entonces optaron por contratar un estudio jurídico de Concepción del Uruguay al que transfirieron los expedientes con las deudas de las empresas para que gestione las cobranzas de todos los morosos. “Entablamos una demanda en la Justicia Federal de Concepción del Uruguay”, afirmó Roh. Si bien “todos deben pagar, entiendo que no es justo que reclame o vaya a la justicia por un gastronómico con una empresa familiar y no le reclame primero a las grandes empresas con deudas abultadas”, aseguró. En ese escenario la “Concesionaria de las Termas no está exenta de esta situación. Tenemos una deuda y no pudimos acercarnos para hablar con la empresa, no es una sola empresa, hay varias dentro del complejo Termas de Concordia. Nuestro estudio jurídico está iniciando las gestiones de cobro”. El gremio notificó a la Municipalidad, al Concejo Deliberante, a los Entes de Turismo, a los Ministerios de Trabajo de la Nación y de la Provincia y a la AFIP. “Hemos cursado carta documento denunciando esta situación”. “Determinamos que la empresa no está cumpliendo con lo que le corresponde en relación al “personal que ellos mismos declaran”, aseguró Julio Roh. Y agregó que el gremio posee “una deuda certificada por trabajadores que se desempeñaron durante mucho tiempo dentro del complejo, a los cuales no les han pagado la obra social, ni el sindicato, ni los aportes; y vamos a reclamar nada más que eso”. Según informan la suma adeudada por Verter S.A, firma concesionaria de las termas, rondaría los 600 mil pesos y comprendería al período completo de la gestión anterior. “La situación nos ha llevado a tomar la decisión de cortar esto y que no se siga con este vicio de patear las deudas para adelante”, sostuvo. La concesionaria cuenta con al menos 12 trabajadores. “Nuestra preocupación es que la empresa sigue funcionando y sigue generando deuda. Reclamamos una deuda que es real y que nos corresponde. A lo largo del tiempo se ha ido estirando y ha llegado a una cifra que hoy presentamos directamente ante la justicia porque ya no hay otra vía, se nos cerraron todos los caminos”, lamentó el dirigente. El mecanismo empleado por las empresas para eludir los aportes es moneda corriente: “Se hacen las presentaciones del formulario 931 (cargas sociales) en la AFIP pero no se pagan, pueden tener trabajadores sin registrar o mal registrados con media jornada que no es tal y que disimula precariedad laboral”. Explicó que en el sindicato se encendieron las luces de alarma cuando “los trabajadores de las termas se quedaban sin obra social, de repente la empresa se vio imposibilitada de presentar los 931 (leyes sociales); después de cinco meses de no presentar el formulario, la AFIP considera que la empresa no tiene más empleados, entonces desaparecieron de todos los padrones de la seguridad social”, contó. Sin embargo, “los trabajadores en ningún momento pueden quedar sin obra social, les entregan un recibo donde se les dice que se les hizo una retención o descuento por el pago de la obra social. Cuando detectamos que los trabajadores salieron del padrón se hicieron las presentaciones por medio de la obra social de Buenos Aires y se consiguió en seguida incorporarlos al sistema. Bajo ningún punto de vista íbamos a dejar a los trabajadores sin cobertura, hay gente que necesita atención, hay una chica embarazada, una señora que espera un trasplante. Enseguida se solucionó”. Entretanto, los abogados que representan al gremio estudian qué responsabilidad le cabe a la Municipalidad de Concordia. “Los artículos 29 y 30 de la Ley de Contrato de Trabajo obligan a quien entrega una concesión a controlar que periódicamente se hagan todos los aportes de los trabajadores. La empresa que explota el servicio no es la dueña, el contrato debe tener un marco regulatorio que disponga un control. La justicia dirá si el Municipio es solidariamente responsable o no”, deslizó. “Iniciamos la causa y la vamos a seguir, nosotros necesitamos recuperar ese dinero porque los trabajadores reclaman servicios, cada vez son más costosos y tenemos que brindarlos”, por eso “es un sindicato”, concluyó Julio Roh.