E
l Procurador General del Poder Judicial de Entre Ríos, Jorge Amílcar García, confirmó que luego de la feria judicial imputará a una veintena de personas por la sedición y extorsión policial de diciembre en Concordia. En ese sentido, García expresó: "esto es clarísimamente sedición, lo mismo que instigación a los robos calificados" que fueron los saqueos, dijo el funcionario este sábado en declaraciones a Radio Nacional. Agregó que el acuerdo firmado por el gobernador con los policías insubordinados fue "muy válido para apaciguar, porque Concordia era una ciudad atrincherada el 8 de diciembre", pero "nunca puede generar ninguna legitimidad de ningún reclamo". "Hemos juntado toda la prueba y ahora, en los primeros días de febrero, vamos a imputar concretamente", anunció García, porque "el quebrantamiento de la norma no tiene ninguna posibilidad de ser olvidado ni negociado", advirtió. Sobre la protesta de este viernes en la ruta 14, en uno de los accesos a Concordia, el procurador dijo que "fueron a ese lugar y entregaron folletos, y son las mismas 20 personas que están imputadas de estos delitos, que se ven venir el garrote de la pena legítima. Llevaron a todas sus esposas, dijeron que iban a cortar la ruta, obviamente no la cortaron porque se iba a agravar su situación". García recordó que los policías que participaron de los hechos de diciembre “se llevaron puesto medio Código Penal” y la pena que les correspondería "puede llegar a ser muy alta". "La imputación llega a 18-20 personas, que son las que con mayor violencia hicieron los actos de vandalismo, además de todas las personas que también tenemos analizadas que entraron a los comercios a sustraer bienes", dijo. Explicó que si una persona decide ingresar a la fuerza policial, debe respetar las reglas y reafirmó que los uniformados no pueden tomar las armas para extorsionar al gobierno de turno. García resaltó la violencia con la que se ocupó la Jefatura de Policía de Concordia y que entre otros delitos incurrieron en el de privación ilegítima de la libertad e instigación a delitos graves, como por ejemplo el robo calificado.