T
ras pasar cuatro años prófugo y haber logrado esquivar la instancia donde debía ser juzgado por delitos de lesa humanidad cometidos en la costa del Uruguay, José Darío Mazzaferri deberá ahora enfrentar a la Justicia y afrontar un nuevo proceso donde se investigarán las denuncias en su contra. El ex policía federal, uno de los principales responsables de la represión en Concepción del Uruguay durante la última dictadura, estaba originalmente imputado en la causa Harguindeguy, que llegó a juicio oral durante 2012. Sin embargo, su fuga le garantizó la impunidad hasta que finalmente fue encontrado hace un mes en la provincia de Buenos Aires. Ahora el represor afrontará un nuevo proceso y se estima que la instancia oral se desarrollará este año en Paraná, tal como sucedió con la causa que lo tenía imputado en un primer momento. Así lo confirmó a Uno la abogada María Isabel Caccioppoli, quien representa a varias de las víctimas del terrorismo de Estado que actúan como querellantes. “Me comentaron desde el tribunal que ya tienen muchísimas pruebas, y yo también tengo nuevas pruebas. La idea es aportar nuevas cosas, para demostrar otros casos que no han sido ventilados y en los cuales Mazzaferri también fue responsable”, explicó la letrada. Cabe destacar que el ex policía cumplió un rol central en el engranaje represivo que funcionó durante la última dictadura cívico militar en Concepción del Uruguay, a tal punto que el querellante César Román, quien hizo la denuncia que dio origen a la causa Harguindeguy, afirmó que él “comandaba el microproceso del Estado terrorista” en la región. Según señaló Caccioppoli, sería bueno que en esta oportunidad “el Estado provincial pueda actuar como querellante”, acompañando a las víctimas y como un gesto de reparación histórica. La detención ilegal y torturas cometidas contra un grupo de jóvenes uruguayenses tuvo lugar en el episodio conocido como “La Noche del Mimeógrafo”, sucedida cuando un grupo de estudiantes secundarios fue capturado en sus respectivos domicilios la noche del 16 de julio de 1976 y alojados en la Delegación local de la Policía Federal. Los días previos, aquellos estudiantes habían impreso una serie de volantes donde alertaban por la pérdida de dos conquistas: el medio boleto estudiantil y la conformación de los centros de estudiantes. La causa Harguindeguy llegó a juicio oral bajo la forma de una megacausa, que reunió los delitos cometidos en Gualeguaychú, Concordia y Concepción del Uruguay. Allí fueron condenados cuatro imputados (Juan Miguel Valentino, Naldo Miguel Dasso, Francisco Crescenzo y Julio César Rodríguez), mientras que otros tres resultaron absueltos (Juan Carlos Mondragón, Marcelo Pérez y Santiago Kelly del Moral). El ex comandante del Segundo Cuerpo del Ejército, Ramón Genaro Díaz Bessone, había sido apartado de la causa por razones de salud, mientras que el exministro del Interior durante la última dictadura, Albano Harguindeguy, falleció durante la etapa oral del juicio, antes de la sentencia.