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a inflación de diciembre pasado fue del 3,16%, la más alta del año pasado, y, con ese porcentaje, el acumulado de 2013 alcanzó el 25,09 %. Así surge de la última medición del Observatorio de Datos Económicos y Sociales de la CGT opositora, que coordina Jorge Sola (Sindicato del Seguro), de cuyo relevamiento resulta que, en diciembre, un adulto necesitó de un ingreso por mes de $ 2.001,44 ($ 65,80 por día) para no ser pobre, mientras que una familia tipo (dos adultos mayores y dos hijos menores) requirió de $6.184,45. La canasta básica total de una familia tipo costó el mes pasado $ 6184,45, de los cuales el 37% (es decir, $2288,25) representa solamente el rubro alimentos. A partir de estos números, que ayer anticipó Clarín, la central obrera que conduce Hugo Moyano consideró ayer que “los trabajadores han sido elegidos como moneda de ajuste para un modelo económico que hace agua por varios flancos” y enumeró las últimas decisiones oficiales que la llevaron a esa drástica conclusión: “Devaluación del peso respecto del dólar a ritmo inusual; quita de subsidios a las tarifas energéticas y de transportes; creación de nuevos impuestos y propuestas para aumentar otros en el curso de los siguientes meses; imposición de un techo del 18% para las paritarias 2014; blanqueamiento de los aumentos en alimentos y desaparición del congelamiento de precios, y aumento de los combustibles”. En ese sentido, el líder cegetista afirmó que el acuerdo de precios que se lanzó oficialmente ayer “suena más a expresión de deseos que a verdadera lucha contra la inflación ”, ya que “sólo recae sobre el 3 % de los productos alimenticios que circulan en el mercado y deja de lado la vestimenta, los gastos de vivienda, de transporte, de salud y de educación”. Por eso consideró que el anuncio gubernamental es “solamente un ejercicio de marketing político antes que una verdadera política económica de Estado que intente poner un parate a la escalada inflacionaria de los últimos dos años”. En el comunicado de prensa, Moyano sostuvo que “con este maquillaje, se trata de establecer la sensación de estabilidad en los precios para luego, con ello, delimitar la discusión salarial de este año y ponerle un techo escaso al necesario reacomodamiento que necesitaran en sus haberes los trabajadores para el año que comienza”. Y advirtió: “No vamos a permitir que se avale desde los escritorios de los funcionarios el cercenamiento del derecho salarial y la libre discusión paritaria. Cualquier intento de limitar, por la forma que sea, la libre discusión salarial –destaca el texto- encontrará el reclamo en las calles con su más enérgico repudio ante una maniobra que trata de ubicarnos como responsables de la inflación cuando lo que somos es víctimas de un modelo que no encuentra mejor receta que el ajuste sobre los trabajadores”. El Observatorio cegetista que coordina Jorge Sola, abogado y con un posgrado en Ciencias Políticas y Sociología, funciona desde febrero pasado y está integrado por 25 personas que trabajan en conjunto con la Secretaría de Empleo y Estadística de esa central. Ayer también difundió el aumento porcentual de los alimentos de la canasta básica entre enero y diciembre de 2013, de donde surge que el precio que más se incrementó en todo el año fue el de la harina de trigo.