E
l nivel de actividad económica suma 13 meses consecutivos en alza y entre enero y octubre pasado acumula una mejora de 5,4% con un fuerte aporte positivo por el lado de la oferta por parte de sectores productores de bienes como el agro, la construcción y la industria, informó la agencia oficial Télam. La campaña agrícola 2012-2013 marcó un avance de 15,6% en la producción total de granos, tras la contracción de 13,3% registrada en 2011/2012. En ese sector, en particular, se destacó durante la última campaña el crecimiento en la producción de soja (+9,3 millones de toneladas) y de maíz (+10,9 millones de toneladas). En lo que respecta a la industria, en los 11 primeros meses del año el nivel de actividad acumula una mejora de 0,3%, traccionada por el sector automotriz que en 2013 volvió a batir nuevos récords. Según la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa), entre enero y noviembre se produjeron un total de 746.085 unidades, con un crecimiento de 6,1% respecto a igual período del año pasado. El mercado interno fue el motor de esta dinámica, ya que las exportaciones cayeron 1% en el acumulado del año, debido al moderado crecimiento de la economía brasileña que es el principal destino de los envíos argentinos. La construcción, otro de los motores de la economía argentina, explicó la fuerte mejora registrada en 2013 por la producción de minerales no metálicos, con un avance de de 6,1% acumulado, mientras que las industrias metálicas básicas -que comprende al acero y al aluminio- se expandieron 2,1% entre enero y noviembre. La producción de combustibles, en constante declino durante los últimos años, también marcó números positivos gracias al fuerte crecimiento que tuvo YPF, del 10,7% interanual. Construcción En lo que hace a la construcción propiamente dicha, en noviembre el nivel de actividad se expandió 2,9% anual y ocho meses consecutivos en alza. Entre enero y noviembre, la construcción creció 4,6% en relación al mismo periodo del año anterior, tras la caída de 3,2% que registró en su nivel de actividad en 2012. El plan Procrear, de crédito para la vivienda, sigue siendo el principal impulsor de la demanda interna. Al 23 de diciembre pasado, 43.800 obras ya fueron comenzadas –de las cuales el 86% corresponden a la construcción de viviendas–, con un desembolso de 7.198 millones de pesos, a las que se deben sumar 16.945 viviendas concretadas desde que comenzó la ejecución del programa. La venta de cemento, uno de los principales termómetros del sector de la construcción, marcó en los primeros 10 meses del año un crecimiento de 11,7% anual. Del total de cemento comercializado en 2013, una de cada tres toneladas despachadas correspondieron a obras realizadas bajo el plan Procrear. A modo de ejemplo, las proyecciones dan cuenta que los 83 desarrollos urbanísticos previstos hasta el momento del Procrear demandarán 354,000 toneladas de cemento, 221.000 toneladas de cal y 118 millones de ladrillos. En ese marco, en diciembre se anunció la adjudicación de obras para 18 desarrollos urbanísticos que involucran a 17 empresas constructoras, 3.826 viviendas y $ 2.000 millones de inversión en obra civil e infraestructura. En total ya hay adjudicadas obras en 25 desarrollos urbanísticos. Consumo Télam, por otra parte, informó que el consumo privado mantuvo un elevado dinamismo durante 2013 ya que las ventas en supermercados crecieron un 25,8% anual acumulado a noviembre, y en ese marco las ventas en centros de compras se expandieron un 29% en igual período, según los últimos informes dados a conocer por el Indec. El incremento en el consumo se vio explicado en parte por la sostenida evolución de los préstamos al sector, que crecieron 36,2% anual. A esto se sumó, remarca la agencia oficial, el bajo nivel de desempleo –que en el tercer trimestre del año retrocedió al 6,8%– y la dinámica salarial que permitió apuntalar a la demanda. En lo que respecta a los salarios, en el sector privado mostraron en octubre un crecimiento mayor al 25,3% interanual, a lo que se sumaron medidas de corte impositivo que impactaron positivamente en el ingreso de los argentinos. Respecto a este último punto se destaca la deducción especial por medio de la cual los salarios brutos menores a 15.000 pesos dejaron de tributar el impuesto a las ganancias, mientras que para los haberes de entre 15.001 y 25.000 pesos el mínimo se incrementó un 20%. Con estas modificaciones, sólo el 10,2% de los trabajadores registrados y el 0,7% de los jubilados tributan el impuesto a las ganancias. También se establecieron nuevas escalas para el Régimen Simplificado para Pequeños Contribuyentes (Monotributo), que implicó un incremento de todos los tramos de facturación en un 100%, medida que benefició a 2.250.338 monotributistas. La asignación universal En tanto, la Asignación Universal por Hijo y por Embarazo se incrementó de 340 a 460 pesos mensuales, lo que implicó una suba de 35,3% y un esfuerzo fiscal para el Estado de 8.142 millones de pesos. En ese marco también se incrementaron los topes salariales para recibir asignaciones familiares en un 78,5%, lo que permitió que 850.000 nuevos chicos sean cubiertos por el salario familiar. En el aspecto previsional, en el marco de la Ley de Movilidad Jubilatoria, los haberes se incrementaron un 15,18% en marzo y un 14,4% en septiembre, lo que arrojó una suba anual de 32%.