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e la redacción de INFORME DIGITAL Desde hace años, el programa de prevención de Infecciones de transmisión sexual (ITS) / Sida de la Universidad nacional de Entre Ríos realizando una constante labor educativa sobre la necesidad de tomar las medidas preventivas necesarias frente a esta problemática y estas tareas se intensifican con campañas de concientización sobre todo llegando al 1º de diciembre, que es el Día mundial de lucha contra el Sida. La trabajadora social Silvia Primo, integrante del programa, se refirió al panorama en la provincia y los obstáculos a nivel educativo y social en general que atentan contra la posibilidad de prevenir esta grave pero prevenible enfermedad: “el VIH Sida es un tema directamente relacionado con lo educativo, con la salud. Es un tema de raíz social y se sigue vinculando con la pobreza. Con el cada vez mayor aumento de casos en mujeres jóvenes, en personas que son heterosexuales, queda afuera toda la estigmatización existe todavía sobre el VIH Sida, de que quienes lo padecen son homosexuales o son adictos a las drogas intravenosas. Evidentemente ya no hablamos más de grupos de riesgo sino de conductas y de prácticas de riesgo que están vinculadas a una falta de educación y al no uso de las medidas preventivas”, dijo en diálogo con Radio F5. En relación con el panorama que observa en la provincia en materia de Sida, Primo manifestó que la preocupación está puesta en “los más jóvenes y las más jóvenes, porque están apareciendo muchos casos de embarazos adolescentes que vienen acompañados de VIH Sida. Entre Ríos tiene entre un 30 y un 32 por ciento de embarazos adolescentes y no es una novedad; es una cifra que viene aumentando notoriamente desde hace varios años y lo que está apareciendo ahora es que esos embarazos están acompañados de VIH Sida y esto es complejo porque obviamente denota que no hay educación sexual, no hay una estimulación de proyectos de vida, donde en algunas ocasiones el embarazo termina siendo una salida de concretar un proyecto de vida porque no hay proyectos laborales, porque no hay proyecto para otras cuestiones. Esto también tiene que ver con la educación; tenemos un gran deterioro de la educación pública, eso tampoco lo podemos negar y obviamente que es un caldo de cultivo para este tipo de situaciones donde hay abusos, hay violencia, hay muchos riesgos de infecciones, de adicciones intravenosas que son también parte de la cosa”. La profesional advirtió que el panorama “no es demasiado alentador si nos quedamos quietos” aunque sí destacó “el trabajo de las organizaciones no gubernamentales” en la provincia. Respecto el acceso a los tratamientos, si bien admitió que un 70 por ciento accede a los cuidados médicos necesarios ante la portación del virus o el desarrollo de la enfermedad, Primo sostuvo que de las 120.000 a 150.000 personas que se estima están infectadas en la Argentina hay un 30 por ciento “que no lo sabe, que está infectado o infectada y hay muchas dificultades para la adherencia al tratamiento, para poder sostener el tratamiento que no es fácil, que es para toda la vida (porque) el Sida no se cura, entonces por eso se trabaja y es necesario trabajar tanto en prevención”.