E
ntre los que no encontraron lugares en las listas para la Cámara baja, sorprendieron en su momento los nombres de Paula Bertol –que se abocará a la candidatura presidencial de Mauricio Macri-, y oficialistas de peso como Stella Maris Córdoba –involucrada en la lucha contra la trata de personas en Tucumán-, Fernando Yarade y Oscar Albrieu, salpicado por acusaciones sobre el cobro de dos sueldos. No sin polémica, la santacruceña Elsa Álvarez quedó afuera de la nómina del radicalismo. La diputada, cuya intención era renovar su mandato, fue obviada por el armado que estuvo a cargo del hombre fuerte del radicalismo en Santa Cruz, el diputado Eduardo Costa, gran triunfador en las PASO. El actual presidente del bloque Frente Peronista, el mendocino Enrique Thomas, bajó su candidatura al descartar la posibilidad de medirse en las internas con Daniel Cassia, quien finalmente encabezó la lista de Compromiso Federal, el partido de los hermanos Rodríguez Saá, que deberá hacerle frente a la arrasadora victoria de Julio Cobos en las primarias. También hay que mencionar al cordobés Francisco Fortuna, quien era la principal espada del gobernador José Manuel de la Sota en el Congreso, pero entró en la nómina de Unión por Córdoba, que se juega con una carta fuerte: el exgobernador Juan Schiaretti, quien salió airoso de las PASO. En el Senado, el que no encontró lugar entre las listas pese a su deseo de continuar fue Samuel Cabanchik. Otro caso notorio es el de otro exgobernador, el chaqueño Roy Nikisch¸ quien debió dejar de lado sus aspiraciones a favor de su otrora referente partidario, Angel Rozas, que encabezará la lista de Unión por Chaco para el Senado. Algunos diputados sabían que no renovarían sus bancas desde principios de este año e incluso desde 2012. Uno de los casos más visibles fue el de Blanca Blanco. La esposa del gobernador santacruceño Daniel Peralta le complicó el quórum al Frente para la Victoria en varias oportunidades, desde aquel recordado episodio en la Legislatura provincial que enfrentó al mandatario con La Cámpora. Desde entonces, Blanco no se privó de votar en contra todo proyecto impulsado por el oficialismo. Mabel Müller se convirtió en otra de las diputadas “rebeldes” del bloque y definitivamente se alejó del kirchnerismo a partir de la votación del acuerdo con Irán por la causa AMIA. Fue así como quien fuera una referente del duhaldismo se sumó al bloque del Frente Renovador, pero no irá por la renovación. El que directamente quedó relegado fue Jorge Cardelli (Proyecto Sur), poco convencido de la alianza entre su exjefe político Fernando “Pino” Solanas y Elisa Carrió, líderes de UNEN. Tampoco volverá al Congreso más de la mitad de los “agrodiputados” que ingresaron al Parlamento en 2009 con un fuerte envión tras el enfrentamiento entre el campo y el Gobierno. Los radicales Jorge Chemes (hombre de la CRA de Entre Ríos), el pampeano Ulises Forte, el chaqueño Pablo Orsolini (ambos de Federación Agraria) y el correntino Lucio Aspiazu, finalmente se resignaron y, como estaba pronosticado, no irán por la renovación. Por el contrario, se van con el sabor amargo de no haber conseguido más leyes para el sector. En la Cámara alta, aún no deja de ser una sorpresa la ausencia de la chaqueña Elena Corregido. Si bien la senadora se mostró muy cercana a Aníbal Fernández -entre otros proyectos, presentaron juntos el de voto joven-, el kirchnerismo terminó “pasándole factura” por aquel voto en contra de la resolución 125. María Eugenia Estenssoro tampoco halló lugar en las listas. Convencida de que el camino debía ser un acuerdo con el FAP y la UCR, Estenssoro llevó al máximo las diferencias con Carrió en septiembre del año pasado, cuando se incorporó al interbloque que responde al gobernador santafesino Hermes Binner. Pero el quiebre con Lilita la dejó fuera en el marco del reacomodamiento de UNEN. Por el oficialismo no volverán a la Cámara baja Celia Arena, Raúl Barrandeguy, Nancy González, María Eugenia Bernal, Carmen Nebreda, Oscar Currilén, Ermindo Llanos, Juan Salim, Rubén Yazbek y Juan Carlos Forconi -quien se sumó al bloque a fines de abril-. También termina su breve mandato Juan Carlos Bettanín (Nuevo Encuentro), quien asumió en reemplazo de Agustín Rossi a principios de junio. Lo mismo sucede con el titular de la AFSCA, Martín Sabbatella, cuya licencia termina el 9 de diciembre. Quedaron afuera siete radicales: Jorge Albarracín, Jorge Mario Álvarez, Mario Barbieri, Hugo Castañon, Hipólito Faustinelli, Gladys Espíndola y Rodolfo Fernández. No seguirán los peronistas disidentes Daniel Germano, Nora Videla y Sergio Pansa –los dos últimos fueron expulsados del bloque Compromiso Federal, pero formalmente continúan en él-. Por esa fuerza tampoco seguirá Alberto Pérez. Se vence el mandato de los massistas Roberto Mouillerón –titular del bloque del Frente Renovador-, Carlos Carranza y Raúl Rivara, que tampoco son candidatos. El tiempo dirá si la presidencia de la bancada es asumida por el propio Sergio Massa. Tampoco hallaron lugar en las listas los juecistas Susana Mazzarela y Gumersindo Alonso; dos soldados de Elisa Carrió -Carlos Comi y Horacio Piemonte- y los aliados del kirchnerismo José Brillo (Movimiento Popular Neuquino), Daniel Brue (Frente Cívico por Santiago), María Cristina Regazzoli (PJ La Pampa) y Walter Wayar (Frente Peronista Federal). Cuatro bloques unipersonales desaparecerán de la Cámara baja: Carlos Favario (Demócrata Progresista), Julio Ledesma (Corriente de Pensamiento Federal), Eduardo Ibarra (Unión por San Juan) y Marcela Rodríguez (Democracia Igualitaria y Participativa). Completan la lista de “heridos” en la Cámara de Diputados Julián Obiglio (Pro), Estela Garnero (Córdoba Federal) y los dos miembros del Frente Cívico y Social catamarqueño, Mariana Veaute y Pedro Molas. Los senadores que tampoco volverán al Parlamento tras las elecciones son el chaqueño Fabio Biancalani (FpV), el entrerriano Arturo Vera (UCR), la rionegrina María José Bongiorno (FpV), la fueguina María Rosa Díaz (Nuevo Encuentro), el neuquino Horacio Lores (Movimiento Popular Neuquino), el salteño Juan Agustín Pérez Alsina (Renovador de Salta) y la rionegrina Noemí Sosa (UCR), quien completará el mandato del fallecido Pablo Verani. Afuera en las PASO Según publicó el Semanario Parlamentario, la Cámara de Diputados tendrá dos importantes bajas después del 10 de diciembre. Se trata de dos legisladores de alto perfil que resultaron derrotados en la interna de UNEN: Alfonso Prat-Gay y Ricardo Gil Lavedra. El primero se quedó sin chances de acceder a la senaduría, mientras que el segundo no podrá ir por la renovación en la Cámara baja, lo cual abre un nuevo interrogante: quién presidirá el bloque radical. Otra que no volverá al Congreso es la diputada neuquina Olga Guzmán, quien perdió la interna en manos de la lista que encabeza Guillermo Pereyra y hasta denunció “amenazas” y “maltratos” durante la campaña.