D
e la redacción de INFORME DIGITAL Un nuevo escándalo estalló en la pequeña localidad de General Campos, del departamento San Salvador. En febrero la ciudad fue noticia por la distribución de Boletas municipales con mensajes antisemitas. Esta vez se instaló un nuevo caso que involucra a un alto funcionario municipal, el viceintendente justicialista Enrique Mohr. Según publicó el sitio Reporte Cuatro, Mohr es señalado por la opinión pública por haber mantenido, presuntamente, relaciones sexuales con una empleada municipal en el recinto del Concejo Deliberante. Además hablan de que habría hecho lo mismo en la sede partidaria del PJ. Anoticiado de los comentarios vertidos en los medios locales el intendente Pablo Martínez salió a respaldarlo. En diálogo con una FM local, Martínez aseguró que se trata de una campaña para desprestigiar al viceintendente: “lo están acusando de algo que es un comentario, yo creo que, por lo que tengo conocimiento, si hay algo tendrá que ser responsable es totalmente del ámbito privado”, dijo. Luego señaló que “nadie me puede decir con certeza que haya ocurrido en un lugar público, eso es más comentario, parte de la imaginación de alguna gente. Tanto se difunde, se van cambiando las versiones. Todos tienen un dato distinto”. “Esto forma parte de una campaña difamatoria que me acompañó, que fue candidato a viceintendente, que trabaja, que permanentemente está colaborando. Nos han querido montar una campaña de desprestigio, también relacionada a que estamos enfrentados. Somos un grupo muy unido, se trabaja siempre en el equipo y en el colectivo”, aseguró Martínez. “Conociéndolo a Enrique, creo que en este momento está sufriendo una campaña y nosotros que lo conocemos y confiamos en su palabra, estamos acompañándolo y solidarizándonos con él, diciéndole que tenga fuerzas y que tenga todas las luces para seguir aportando a nuestro proyecto”, concluyó.