L
a reapertura del canje de deuda fue aprobado en el Senado con 57 votos afirmativos, 8 negativos y una abstención, tras ocho horas de debate en la reunión iniciada a las 13.20, luego de seis semanas sin sesionar. Particularmente, el proyecto del Ejecutivo obtuvo una mayoría de 57 a 7 en la aprobación general, mientras que los artículos 1, 5 y 7 que refieren a la derogación de la Ley Cerrojo y al pedido de informes priódicos en el Congreso, consiguieron particularmente el apoyo de 41 a 23 con una abstención. La iniciativa tratada en esta sesión fue presidida por la presidenta provisional Beatriz Rojkés de Alperovich. El proyecto que será analizado por la Cámara Baja busca que el 7% de los tenedores de bonos que no acordaron en 2005 y 2010, puedan incluirse en el plan de pago propuesto por Argentina, ya que de esta manera se evitaría caer en default. El proyecto garantiza que cualquier deuda de pago ofrecida a los tenedores de bonos en diferimiento debe ser igual a las pautadas en 2005 y 2010, asegurando así la equidad para todos los acreedores, con lo que también quedan prohibidos aquellos tratos que les resulten más favorables. Por otro lado, la iniciativa plantea la suspensión del artículo 7 que elimina la llamada “Ley Cerrojo”, con lo que queda abierto formalmente el canje para adecuar los servicios de la deuda a las posibilidades de pago del país. Además queda implicada la renuncia de los derechos adquiridos previamente para liberar a Argentina de cualquier acción judicial, así como que todos los bonos quedarán reemplazados por los “bonos de la República Argentina a la par en pesos step up 2038”, a pagarse en pesos y en nuestro país, a fin de evitar futuros embargos.