D
e la redacción de INFORME DIGITAL El programa Periodismo para Todos (PPT) difundió un informe sobre el viaje de Cristina Fernández de Kirchner a un conocido paraíso fiscal: las islas Seychelles. En este lugar, estaría radicada una de las sedes de la firma Aldyne, que el empresario Lázaro Báez habría utilizado para ocultar supuesto dinero negro del kirchnerismo, según lo denunciado televisivamente. Desde el kirchnerismo, la respuesta no tardó en llegar. Primero a través de un comunicado oficial desde Casa Rosada, que también fue reproducido en su página de Facebook por la Presidenta. Al respecto, se expresó: "Cuánta mentira. Un show mediático que movilizó a jueces, fiscales y fuerzas de seguridad en busca de bóvedas, cajas fuertes y cajas de seguridad ubicadas en Santa Cruz, donde supuestamente se guardaban miles de millones de dólares y euros de la mediática ‘corrupción K’. Causando daño, difamando a diestra y siniestra. Es que el verdadero objetivo nunca es la verdad. La operación evidente y explícita consiste en atacar la memoria del que ya no puede defenderse: del Presidente Néstor Kirchner". Posteriormente, diferentes funcionarios y gobernadores oficialistas salieron al centro de la escena para desmentir lo mostrado en TV y contradenunciar determinadas intenciones por parte del multimedio. Entre ellos, Sergio Urribarri aseguró estar "preocupado por los intentos de destitución del Grupo Clarín" y "las mentiras tras mentiras que ensucian, no sólo la investidura presidencial, sino un proyecto político". Sobre esta línea, según publicó Página 12, el gobernador entrerriano remarcó "la verdad es que lo que más me preocupa es este momento, ya no de tensión, sino de intentos de destitución, porque verdaderamente de esto se trata". A su vez, también consideró "una bajeza pocas veces vista" algunas cuestiones que se dicen en los medios sobre Néstor Kirchner.