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e cara a lo que serán las elecciones legislativas de 2013, Cristina Kirchner tendría pensado dar batalla en todo el país, con hombres y mujeres leales al proyecto k. Ya eligió al ministro de Agricultura, Norberto Yahuar, para disputar los escaños de diputados de Chubut. En Santa Fe, a Jorge Obeid y María Eugenia Bielsa. En tanto que para Chaco jugará el propio Jorge Capitanich, en Capital Federal irá Daniel Filmus, y así podría seguir la lista de kirchneristas puros o aliados que competirán en octubre. Tal como consignó Perfil, el dilema es Buenos Aires. Los nombres para los primeros lugares en la lista de diputados nacionales son, hasta ahora, repetidos en los pasillos de la Casa Rosada: Alicia Kirchner (el apellido es lo que pesa), Florencio Randazzo (para mostrar gestión), y varios intendentes del GBA, para garantizarse la tracción de los municipios y evitar el famoso “corte de boleta” que perjudicó al oficialismo en 2009. Alicia Kirchner, sin embargo, todavía no cuenta con domicilio en la Provincia registrado en el padrón electoral. La figura mimada de la lista será Martín Insaurralde, el intendente de Lomas de Zamora. “Es el Massa ‘bueno’”, graficó un kirchnerista de la primera hora. Lo mostrarán como un eficaz gestor, en un distrito pobre –a diferencia de Massa, que administra un municipio con recursos–, y como un hombre que venció a la adversidad después de un cáncer que lo tuvo a maltraer. Insaurralde le cae bien a la Presidenta. Sin embargo, Cristina sabe que sólo su figura puede atraer a un núcleo duro de votantes que oscila entre el 25% y el 30% del padrón. Por eso, será la principal oradora en todos los actos de campaña electoral hasta octubre. El protocolo K indica que primero hablarán las principales caras de las listas (que podrían incluir otra vez al senador Aníbal Fernández y a la flamante jefa del bloque K en Diputados, Juliana Di Tullio) y que el cierre correrá por cuenta de la jefa de Estado.