E
l médico Hugo Mario Moyano ya se encuentra en su casa cumpliendo el régimen de arresto domiciliario, a partir de la decisión del juez federal ad-hoc Jorge Delorenzi, que le concedió el beneficio en el marco de la causa denominada Área Paraná, que lo tiene como imputado por delitos de lesa humanidad. El otorrinolaringólogo de 64 años fue trasladado el mismo lunes desde la Unidad Penal Número 1, donde se encontraba cumpliendo prisión preventiva desde junio de 2009, hasta su departamento en calle Córdoba, frente a la Plaza Enrique Carbó, en el que permanecerá de ahora en más al cuidado de su pareja e hija. El titular del Servicio Penitenciario de Entre Ríos, Horacio Pascual, confirmó que Moyano “abandonó la unidad penal el mismo día en que se ordenó el alojamiento en su domicilio” y agregó que “a partir de ahora los controles estarán a cargo del Patronato de Liberados y de Gendarmería, que deberán supervisar cada 15 días el cumplimiento de las nuevas condiciones de detención”. Asimismo, la disposición judicial autoriza la continuidad del tratamiento de rehabilitación en un instituto privado, ya que Moyano fue operado de la columna vertebral y, según su defensa, presenta una discapacidad motriz que se ve agravada por su permanencia en el establecimiento carcelario. Por ese motivo ya tenía autorización judicial para concurrir diariamente hasta el Centro de Atención Integral de Cuidados Especiales (Caice), donde permanecía desde la mañana hasta la noche. A partir de ahora serán sus familiares quienes tendrán a su cargo los traslados y Gendarmería deberá supervisar la asistencia del médico al instituto privado. El juez ad-hoc hizo lugar el lunes al pedido de prisión domiciliaria, fijó que la misma deberá cumplirse en calle Córdoba 439, Torre I, Departamento 6 “C” de Paraná y dispuso que su pareja, Laura Zuazaga Abiega, y su hija, María Belén, sean las responsables de la guarda y cuidado del médico imputado por delitos de lesa humanidad. Foja de servicio Hugo Mario Moyano nació el 16 de noviembre de 1948 en la ciudad de Santa Fe. Llegó a Paraná en 1973 y enseguida se incorporó, con el grado de capitán, a la Fuerza Aérea; luego cumplió funciones en el Hospital San Martín y en el Hospital Pasteur, donde se atendía a los pacientes con tuberculosis; en los años siguientes trabajó en el Centro de Salud Corrales y luego en el Hospital de Niños. Durante la dictadura fue agente civil médico del Servicio Penitenciario de Entre Ríos, en los años 1976 y 1977, con funciones en las cárceles de Paraná, y como tal era el encargado de revisar a los detenidos después de sesiones de torturas, aunque en sus informes nunca constaba el estado deplorable en que se encontraban. De los relatos de los ex detenidos políticos surge que eran retirados de la cárcel de Paraná y trasladados al centro clandestino de detención que funcionó en el Batallón de Comunicaciones, a una casa de torturas que había en cercanías de la Base Aérea o dentro mismo de la unidad penal, donde también eran sometidos a tormentos. En los libros de guardia del Servicio Penitenciario constan también las salidas de los presos políticos para ser atendidos en el Hospital Pasteur, donde trabajaba Moyano. Una mujer contó también en sede judicial que Moyano integró el grupo de tareas que participó de un allanamiento ilegal en su casa y que durante aquel asalto fue golpeada, a pesar de estar embarazada, lo que le hizo perder el conocimiento. Cuando reaccionó se sentía descompuesta y pidió llamar a su doctora. Los integrantes de la patota no le contestaron, pero a los pocos minutos un médico ingresó a su habitación. Le llamó la atención que a pesar de la hora –era ya avanzada la madrugada– no parecía recién levantado, sino que estaba prolijamente vestido, con el pelo negro engominado, perfumado, con delantal blanco largo. El médico, al que luego reconoció como Moyano, se paró junto a ella, la miró, le dijo que no pasaba nada y se fue. Tras el retorno de la democracia, el médico siguió desempeñando su labor en hospitales públicos y clínicas privadas de la capital entrerriana, ocupó cargos en instituciones intermedias y dirigió colegios médicos. En 1987 fue imputado en la megacausa denominada Área Paraná y citado a indagatoria, pero luego fue beneficiado por la ley de obediencia debida. Recién el 4 de junio 2009 fue detenido. Hasta el lunes estuvo en la cárcel de Paraná, la misma donde atendía a sus víctimas. Delitos imputados Moyano está procesado en la megacausa denominada Área Paraná como partícipe necesario de los delitos de severidades, vejaciones y apremios ilegales de siete víctimas y la aplicación de tormentos contra otras tres, según la acusación formulada por los fiscales José Candioti y Mario Silva. La causa se desarrolla por el antiguo Código de Procedimientos en Materia Penal de 1888 –vigente al momento en que se cometieron los hechos– que prevé que las actuaciones deben realizarse en forma escrita. Si bien se encuentra en instancia de juicio escrito, se ha visto retrasada por las sucesivas impugnaciones que han efectuado los abogados defensores. En total son 10 los militares, policías y agentes penitenciarios imputados por delitos cometidos en la zona oeste de la provincia durante la última dictadura cívico-militar.