L
uego que un grupo de guías de pesca de la ciudad de Concordia advirtieran sobre un incremento en la pesca ilegal en la denominada zona de exclusión y la falta de controles para evitarla, el propio presidente de la Delegación Argentina ante la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande, Juan Carlos Cresto, consideró “necesario aclarar y, llegado el caso, desmentir algunas publicaciones de estos días en las que se da a entender que se estaría violando la prohibición de pesca comercial o de gran volumen a pocos metros de la Represa de Salto Grande”. En ese sentido, Cresto niega que los organismos competentes (CTM entre ellos) no tomen cartas en el asunto, tal como "afirman los guías de pesca que promovieron la difusión de esta denuncia periodística", remarcando que "es importante que la comunidad recuerde que nuestra empresa tiene un firme compromiso con el cuidado del medio ambiente y la preservación de los recursos naturales”. Y agregó: “este compromiso se traduce en acciones concretas de promoción, prevención y concientización; así como también en el trabajo que articulamos en conjunto con la Prefectura Represa de Salto Grande para proteger las aguas del río y las especies que viven en él". Asimismo, el titular de la delegación Argentina de CTM indica que "Prefectura - además de velar por la seguridad de la infraestructura del complejo - actúa permanentemente en la aplicación de la Ley provincial de Pesca, impidiendo el ingreso de pescadores furtivos al área de seguridad", lo cual "queda demostrado en las actas contravencionales presentadas por Prefectura en la oficina de Recursos Naturales de la Provincia, las cuales reflejan que - en el período 2010/2012– fueron incautados los siguientes elementos: Redes: más de 15 kms. Espineles: más de 2,4 kms. Cañas y reels: 86. Líneas de mano: 285". Por último, el funcionario expresó que "desde la Delegación Argentina ante la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande queremos reiterar – por si hiciera falta – que apoyamos y colaboramos activamente con las tareas que llevan adelante la Prefectura y la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU) para el cuidado, estudio y conservación del río y sus peces. Este trabajo, sin dudas, es menos llamativo que las rimbombantes denuncias de algunos, pero mucho más efectivo si lo que se busca es realmente cuidar a la naturaleza y preservar las especies tradicionales de la zona".