P
olémica por la instalación de salas de juego en la zona céntrica. Si bien la empresa tiene amparo en leyes provinciales, la Municipalidad ejercerá su rol autónomo de hacer respetar el uso de su suelo. La empresa New Tronic hizo pública su pretensión de instalar una sala con máquinas traga monedas en la intersección de las calles Urquiza y Rosario, en pleno corazón del centro de la ciudad y rodeado de instituciones educativas, religiosas, culturales e incluso de patrimonio histórico. La iniciativa generó la natural polémica entre los vecinos, solicitadas de por medio, en la que sostienen la incompatibilidad de la actividad con el carácter de la zona. En este sentido, anoche el jefe de Gabinete, Germán Grané, adelantó la postura del Ejecutivo Municipal: “Los vecinos pueden quedar tranquilos. Porque tenemos la íntima convicción de que el carácter de la comunidad es incompatible con lo que genera esta clase de actividades como consecuencias no deseadas: horarios, congestionamiento vehicular y la propia actividad en sí”. “Entendemos que esta actividad no es compatible con el lugar elegido y para ello utilizaremos las Ordenanzas vigentes. Específicamente, es la Municipalidad la que reglamenta el otorgamiento de factibilidad para el uso del suelo. Por estas cuestiones de tránsito, ambientales, de la planificación urbana y la matriz del desarrollo económico, la zona céntrica no es apropiada para emprendimientos de estas características”, redundó Grané. “Además, en la zona de influencia de Rosario y Urquiza gozamos de un área de protección histórica y cultural que incluye al Teatro Gualeguaychú, a instituciones educativas primarias, secundarias y universitarias, instituciones religiosas que son muy caras al sentimiento de la comunidad y eso como Estado es lo que tenemos que proteger sin desmerecer ninguna actividad”. “Por otro lado, entendemos que el turismo no necesariamente debe estar ligado al juego de azar. Pero el juego de azar sí debe estar ligado al desarrollo turístico. Y para ese desarrollo hay zonas bien delimitadas, que ya tienen su identidad como tal, y es la que propiciamos en todo caso para alentar esta clase de inversión”, referenció el funcionario. “Como Municipalidad no podemos prohibir una actividad que está legalmente permitida, pero eso no implica que perdamos la autonomía al momento de ordenar el uso del suelo en función social y con fines urbanos y ambientales. En ese sentido, nos amparamos en la normativa municipal para impedir su radicación en la zona céntrica de la ciudad”, y agregó: “La actividad ya se desarrolla en la ciudad y en un determinado lugar e incluso no ha generado conflictos de magnitud, sino que ha ayudado al desarrollo de un turismo específico. Entendemos que ese es el concepto que debe prevalecer a la hora de interactuar en la sociedad. Desarrollarse libremente, pero sin generar malestares innecesarios. Además, aquí está operando la llamada licencia social de la que somos respetuosos”. “Gualeguaychú tiene una política de Estado a nivel Municipal en materia de ordenamiento territorial, que incluso viene de otras gestiones y en la actual la hemos consolidado y enriquecido. Me refiero al traslado de las industrias que todavía están radicadas en el casco urbano, para que se ubiquen en la zona industrial. Nosotros hemos aplicado esa normativa y con excelentes resultados para todos, sin excepción. Por eso nuestra postura no es un concepto únicamente ligado a la inversión en materia de casinos o juego de azar, sino para todas aquellas actividades que se entienden son incompatibles en un determinado vecindario”, calificó el jefe de Gabinete.