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ás 500 empresarios participaron de uno de los encuentros más importantes de la Región Centro y debatieron sobre los principales problemas del país con un cuerpo de disertantes de primera línea donde se destacaron los economistas Bernardo Kosacoff y Martín Redrado y el ex presidente uruguayo Julio María Sanguinetti. Desaceleración, recesión, restricción de importaciones, cepo cambiario y el impacto en la economía y las cadenas productivas en un ámbito que se consolida. Redrado fue uno de los más convocantes y en su disertación aseguró que hay que bajar la tasa de inflación y los costos empresarios porque “la rentabilidad está decayendo y se ha consolidado un modelo pro consumo, con poca inversión y con un par de turbinas que aún no se han encendido. Yo creo que la única manera que se movería el tipo de cambio impulsado por el Gobierno es si el Real se mueve más rápido que lo que debería hacerlo, porque el Brasil hace políticas anticíclicas. Yo no propongo una devaluación, quiero que bajen los costos. Yo he estado en contra de la devaluación y de las políticas que aumentan la inflación, pero quiero que se equipare aumentando la producción y la inversión”, dijo el economista. No obstante, y a pesar que Redrado se mostró optimista acerca de cómo el país resolverá los problemas cuando aseguró que no habrá ni un ápice de similitud con 2001 y con las crisis conocida “saliendo en forma de V”, aceptó que la Argentina tiene un problema central para resolver y dependería del gobierno para ver cómo lo resuelve y cómo afecta la vida del comercio en la argentina. “Desde 2010 hay una disparidad vinculada a los costos internos de producción que aumentan al 20-25 % -y no me refiero sólo a salarios sino a todos los insumos y costos de producción- y al movimiento cambiario en el año 2010 cuando la tasa de devaluación fue de 4 % mientras que la tasa de inflación o los costos aumentaron un 20 %. En 2011 el Gobierno trata de corregir y se eleva la tasa de devaluación al 8 %, pero los costos siguen siendo del 25 %. No necesito hablar de caída de la rentabilidad, y esto no es sustentable en el país. La Tasa de devaluación se ubica hoy en el 12 %, pero los costos no bajan del 25 %”, expresó el profesional. En este contexto, aventuró que ubica la devaluación cerca del 18 % y la inflación bajando por el 20 %, y busca ver si se “puede ganar un poco de tiempo y uno ve que busca resolver este problema pero no sabe cómo hacerlo. Intenta a tranqueras cerradas con una visión de pago chico”, ironizó. Optimista Martín Redrado fue contundente a la hora de mirar la perspectiva de la crisis que amenaza en un contexto de contracción y recesión económica, a pesar que cree que las políticas públicas han estancado las exportaciones de la producción primaria en 90 millones de toneladas, cuando la proyección debió ser de unos 130 millones de toneladas para este año, más allá de las cuestiones climáticas que actuaron como barrera. “Con las circunstancias fácticas de precios internacionales y en un momento donde sobre la liquidez en el mundo, y donde ayer la FED dice que voy a inyectar 200 mil millones para comprar bonos y mantener la tasa de largo plazo baja, muestra que en los países están sobrando dólares, y algunos lo están aprovechando”. Tuvo también duros conceptos para las estrategias implementadas a nivel oficial en el país que desalientan la inversión directa internacional, de las cuales la Argentina sólo recibió un 5 % de los 105.000 millones de dólares que ingresaron en América del Sur, según la Cepal, y que “por peso propio debió recibir mucho más ya que se trata del segundo país del continente”. A esto lo eslabonó con la restricciones de importaciones, especialmente la de piezas críticas para la industria nacional- y esto ha generado “una espectacular caída en el nivel de actividad en sectores como papel y celulosa, construcción, acero, automotriz, Etc.” Finalmente, expresó que se está produciendo un drenaje por goteo de los depósitos en dólares del sistema financiero y “cuando la Presidenta anunció que iba a pesificar sus ahorros no hizo más que generar incertidumbre y la gente se preguntó: ¿y ahora qué viene detrás?”, expresó, profundizando sobre las intenciones presidenciales dijo que Cristina “no tiene una intención expropiadora como YPF, y no conoce de Economía, es una gran abogada, gran legisladora, gran disertante, pero no conoce de economía y recién se da cuenta que cada vez que cada uno de nosotros hace un depósito en dólares, se presta solamente a exportadores y no a gente que tiene salarios en pesos. Es decir a aquel que genera dólares y no hay descalce de monedas. Lo que no se presta, por la norma del BCRA se encaja y se deposita. Cuando uno mira los 48 mil millones de dólares hoy 8 mil millones son de la gente, y la buena noticia que esos dólares están, y todo dependerá de cómo se comporte el Gobierno”, explicó.