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a firma entrerriana Tierra Greda Alimentos completó la primera fase de un desembolso de $ 60 millones en su negocio porcino. Con una inversión inicial de $ 17 millones, la compañía perteneciente a la familia del diputado Atilio Benedetti (UCR-Entre Ríos). El ex candidato a gobernador se lanzó a un mercado que vislumbra muy prometedor&.
Ubicada en Larroque, al sur de Entre Ríos y a 50 kilómetros de Gualeguaychú, la empresa produce unas 60.000 toneladas de granos por campaña, tiene silos de acopio y comercializa cosecha propia y de terceros.
Además, produce alimento balanceado a través de un molino inaugurado en 2008, que hoy elabora 15 toneladas de alimento por hora. Tierra Greda es uno de los principales abastecedores de balanceados para los tambos del sur de Entre Ríos.
La firma, que está iniciando sus actividades en el sector porcino, tiene experiencia en el rubro avícola. Produce actualmente 1,2 millones de pollos por año, que le vende a Granja Tres Arroyos. El conjunto de sus negocios le permitió facturar a Tierra Greda $ 80 millones el año pasado.
Para comercializar los porcinos, la empresa tiene una participación minoritaria, junto con otros seis dueños, de un frigorífico local, Carnes del Interior, que faena 3.000 cerdos por mes.
"Hace siete años, cuando empezamos a planear el negocio, nos incorporamos a esta empresa", explicó Benedetti.
La oferta inicial de Tierra Greda será de unos 1.000 cerdos mensuales, volumen que planea duplicar para fines de 2013.
El negocio de los cerdos "es muy auspicioso porque hay una demanda creciente debido a un cambio de hábitos de consumo", indicó Benedetti, y aclaró que la producción de Tierra Greda está libre de la enfermedad de mycoplasma, status que adjudican tres empresas en el país.
El negocio se orienta hoy al mercado argentino, donde cada habitante consume, entre fresco y chacinado, menos de 10 kilos por año, consumo que en Europa, por ejemplo, es cuatro veces mayor. "Tenemos mucho por satisfacer en el mercado interno", consideró el licanciado en Bromatología, político y empresario, aclarando al mismo tiempo que "el producto tiene ventajas comparativas para el mercado internacional".
Asimismo, aunque está lejos de los primeros puestos mundiales, el consumo de carne de cerdo, al igual que la carne aviar, se incrementó en la Argentina a partir del aumento de los precios de los cortes vacunos. El empresario que llegó de la mano del campo al Congreso de la Nación en 2009 no esconde su cuestionamiento de las políticas oficiales.
"Los desaciertos de la política vacuna del Gobierno hacen que hoy falten casi 10 millones de cabezas de ganado", sentenció.
Mientras el consumo de carne vacuna se situó en 57 kilos por habitante en 2011, con una fuerte baja desde su techo de 2009, el consumo de pollo y de cerdo mantuvo su crecimiento.