E
n una audiencia pública realizada este viernes en Colón, se dispuso el traslado y alojamiento en un centro psiquiátrico de Paraná, del joven acusado de dar muerte a su propia madre aplicándole varios golpes con una barreta en la cabeza. La medida fue solicitada por la Fiscalía y aceptada por la Defensa Oficial, por lo que así lo dispuso en juez de Garantías de esa ciudad. Se trata de Miguel Ángel Anderi, de 27 años, quien fuera detenido el miércoles por la mañana en el barrio Alborada, luego de la muerte de su madre Liliana Rocha, de 57 años de edad, a quien habría atacado a golpes, para luego salir a la calle pidiendo ayuda, simulando que alguien habría entrado por una ventana aparentemente con fines de robo. Según se pudo establecer, el joven vivía solo con su madre en el departamento Nº 16, y esa noche había recibido a dos amigos a altas horas de la madrugada, con los que estuvo hasta pasadas las 5, momento que ambos se retiraron. Una vez solo, este muchacho –no se dieron oficialmente detalles del móvil– se dirigió a la pieza de su madre y mientras esta dormía, le asestó unos cinco golpes con una barreta de hierro de unos 45 centímetros, destrozándole el cráneo. Le habría provocado la muerte en forma instantánea, ya que el cuerpo de la víctima parecía estar en posición de descanso. Al parecer, Anderi se bañó y cambió, para luego provocar un serio desorden en el lugar y romper un vidrio, simulando que alguien habría entrado, hechos que se habrían registrado entre las 6.30 y las 7.30, para luego salir a la calle y pedir ayuda. Tras el suceso, tomó intervención la Policía y la Fiscalía en turno, quedando el caso en manos del doctor Juan Malvasio y el fiscal auxiliar Sebastián Blanc. Se dispusieron numerosas medidas y se trabajó en el escenario del brutal crimen, ordenándose el traslado a la Jefatura de los dos amigos del acusado, los que negaron rotundamente tener algo que ver en el caso. Trascendió que la mujer habría decidido someter a su hijo a una internación y tratamiento por las adicciones, lo que habría generado la irracional reacción y ataque. Si bien no hubo datos, el imputado se habría quebrado y reconocido su accionar, quedando detenido por el homicidio agravado por el vínculo, siendo finalmente representado por el defensor oficial, doctor Carlos Fabián Scelzi. Como parte de las medidas se ordenaron pericias psiquiátricas y se dispuso la indagatoria el día jueves, durante la cual el acusado se negó a declarar haciendo uso al derecho que lo asiste, tras lo cual quedó alojado en la Jefatura de Policía. En horas de la noche se produjo un grave incidente en la celda de alojamiento del presunto matricida, ya que habría intentado quitarse la vida mediante el uso de una sábana. Esto fue evitado por personal policial, que por orden del jefe Departamental, comisario mayor Mario Francisco Leonangeli, se encontraba de vigilancia permanente, por lo que el preso fue trasladado al hospital San Benjamín, donde se lo sedó y controló. Ante la seriedad de la situación y la evidente necesidad de tratar y controlar con profesionales a Anderi, la Fiscalía solicitó audiencia al juez de Garantías y ésta se desarrolló alrededor de las 10.30 de este viernes. Durante la misma, el doctor Malvasio explicó que el acusado fue evaluado por el licenciado en psicología Luis Perinotto, integrante del equipo técnico, quien advirtió que tiene una alta tendencia al suicidio y una descompensación psicótica, lo que quedó a la vista con lo ocurrido en la celda la noche anterior. El fiscal dio detalles de los elementos obrantes en la causa como ropas del preso manchadas con sangre y testimonios de la gente. Por todo esto solicitó el traslado e internación provisoria por el término de 60 días, en el Hospital Neuropsiquiatrico Dr. Antonio Luis Roballos, de la ciudad de Paraná. La solicitud fue aceptada por la defensa técnica y el doctor Scelzi solicitó se haga efectiva la medida, por lo que el juez de Garantías Miño dispuso labrar el oficio de traslado a la capital provincial, bajo una custodia policial que salió en las primeras horas de la tarde.