E
n enero del pasado año fueron 13 las víctimas fatales. En lo que va de 2012 se registraron 7 decesos. Hay que tener en cuenta que en la primera quincena ingresaron a la provincia 480 mil vehículos, mientras que en el primer mes de 2011 lo hicieron 500 mil vehículos. Se trata del arribo de casi la misma cantidad de móviles pero en la mitad de tiempo. Visto así, los accidentes no parecen más que números. Sin embargo, detrás de cada dígito se abisma una tragedia. Por eso, si bien los índices pueden ser alentadores, las medidas de control en vehículos y conductores, además de una buena educación, siguen siendo ineludibles para prevenir los siniestros que conllevan al dolor insondable. Sin dudas, el cuidado y la concientización son tareas que nunca se agotan. Justamente, una de las funciones de la Dirección de Prevención y Seguridad Vial de la Policía de Entre Ríos es el control caminero para reducir los riesgos de los viajeros. El titular del organismo, Comisario General Gustavo Maslein, informó que “los operativos especiales de control comenzaron en Navidad y continuarán durante la temporada estival hasta marzo”. A su vez, indicó que “las vigilancias se realizan en puestos camineros fijos y se refuerzan con patrullas móviles en lo que denominamos ‘puntos negros’. Éstos son los lugares de mayor riesgo de accidentes por haber curvas, lomas o puentes”. De las rutas que atraviesan la provincia, la nacional número 12 es la más problemática en cuanto a choques y despistes. El motivo es la gran afluencia de tránsito y las características del trazado de doble mano. En cuanto a la infracción más cometida en ruta, Maslein indicó que “es el adelantamiento indebido en loma, puente o curva con doble línea amarilla. Es en lo que más hincapié estamos haciendo en cuanto prevención para evitar los accidentes frontales”. El organismo La Dirección de Prevención y Seguridad Vial existe desde 2006, tiene competencia en rutas provinciales y nacionales, cuenta con 400 efectivos y 17 puestos fijos, además de los móviles. En cuanto a la influencia que ha tenido este organismo, Maslein informó que el año de su creación “hubo 147 víctimas fatales. Cinco años después, se redujeron a 103”. De todos modos, “si bien en este tiempo han disminuido las muertes en rutas, aumentaron los accidentes fatales urbanos. La principal causa son los siniestros en moto”, sostuvo el funcionario. Controles Entre las inspecciones que se realizan en los caminos, se cuentan aquellas que ponen el ojo en las condiciones de seguridad de los vehículos (cubiertas, luces, uso del cinturón de seguridad, balizas, matafuegos y casco para los motociclistas). En el caso de los camiones también se hace el control de cargas. Además, los agentes de la Dirección de Seguridad Vial solicitan el registro de conducir de quien va al volante, la documentación del vehículo y el seguro del vehículo. También controlan la cantidad de ocupantes; en los automóviles no pueden superar a la de los cinturones y en las motos no pueden ser más de dos. Asimismo, se fijan en que no vayan personas en las cajas de los camiones, las camionetas y los utilitarios. Otro controles que se efectúan son los de alcoholemia y velocidad. En caso de cualquier infracción, se labra un acta y, en los casos que corresponda, se retiene el vehículo. Las multas pueden pagarse en el lugar, de manera voluntaria, con un 25% de descuento. Los accidentes De los accidentes fatales ocurridos en este año, tres fueron despistes y tres fueron choques frontales. En uno fallecieron dos personas. País Según un informe del Instituto de Seguridad Vial (ISEV) durante 2011 disminuyó en la Argentina un 23,5% la mortalidad en accidentes de tránsito respecto del año anterior. El índice de mortalidad vial mide la cantidad de muertes inmediatas en los accidentes, no obstante se incorporó una corrección que considera los decesos en los siguientes 30 días al siniestro. A su vez, la morbilidad vial, que incorpora a los lesionados graves, también se redujo en un 6,1%. No obstante, destacó que la siniestralidad urbana “aumentó un 5%” hasta llegar a un 64,3% del total de siniestros viales y que la mortalidad urbana “aumentó 3 puntos”. Alcoholemia La norma establece que no se podrá circular con un vehículo cuando la tasa de alcohol en sangre sea superior a 0,5 gramos por litro. Para el caso de los motociclistas, la tolerancia es de 0,25 gramos. Para los choferes de transportes de cargas y pasajeros no existe tolerancia al respecto; por lo tanto, el nivel de alcohol en sangre debe ser nulo. Las cantidades no se pueden mensurar en vasos de alguna bebida alcohólica porque los niveles de alcohol en sangre dependen de las características del organismo de cada persona. “Distractores” Los celulares, la radio, el GPS, funcionan, según indicó la asesora legal de la Dirección de Seguridad Vial, Marina Hernández, “como distractores de los conductores”. A esto agregó que “está probado científicamente que, por ejemplo, hablar por celular, incluso con alta voz o manos libres, causa la pérdida de reacción. Es casi como estar alcoholizado”. En cuanto a los suplementos tecnológicos que se ofrecen para los autos y las motos, Marina Hernández dijo que “ese es el encontronazo que hay con el mercado que vende muchas cosas para vehículos que son perjudiciales para la seguridad vial”. Sillas y bebés Las sillas para los menores deben ir ubicadas en el asiento trasero, sujetadas por alguno de los cinturones y mirando hacia adelante. Lo que no está estipulado es la edad límite hasta la que deben ser usadas. Por otra parte, las madres que van con el bebé en brazos deben sentarse en la parte trasera. Mitos La sábana blanca (para tapar los cuerpos) y el botiquín de primeros auxilios siempre son mencionados entre las exigencias para viajar. Desde la Dirección de Seguridad Vial aseguraron que ninguno de los dos forman parte de los requisitos de seguridad solicitados.