E
n la Dirección de Tránsito de la Municipalidad de Paraná decidieron concientizar a los conductores con una charla que durará cerca de dos horas. Si bien todavía faltan ajustar algunos detalles burocráticos, la intención es que en menos de tres meses, cada persona que saque el carné de conducir o realice la visación reciba la charla de capacitación. El director de Tránsito, José Zamora, explicó que la medida se debe tomar lo más rápido posible. “Con Héctor Vergara, el subsecretario, decidimos impulsar esta medida para que el conductor tome conciencia de que cada vez que maneja tiene un arma en la mano”, sentenció el funcionario. Lo más complicado será concretar el proyecto porque si bien la idea surgió de Tránsito ahora tienen que ponerse de acuerdo con las demás reparticiones. Los funcionarios de la actual gestión que encabeza la intendenta Blanca Osuna, se encontraron con una importante cantidad de nuevas direcciones. Por ejemplo, ahora Zamora deberá esperar la autorización de su par en la Dirección de Habilitación del Registro de Conductor. Para entender la atomización de las áreas municipales solo basta con saber que también hay una Dirección de Exámenes de Conducir (en la Toma Vieja). En los pasillos de la Municipalidad cada vez suena más fuerte el rumor de que la idea central es unificar todas las áreas para reducir semejante estructura. Solución En la Dirección de Tránsito, Zamora y Vergara se pusieron de acuerdo para tomar medidas que sirvan para mejorar la “endiablada” circulación de los conductores paranaenses. Zamora está convencido de que el problema es social. “Papá y mamá, muchas veces, quieren dejar a su hijo adentro del aula”, bromeó para explicar las inexplicables dobles y hasta triples filas que se arman en las puertas de las escuelas a la hora de la entrada y salida de los alumnos. Otro tema es que en Tránsito pueden controlar los autos y las motos pero no los colectivos, taxis y remises que están bajo la órbita de Transporte. En tanto que ahora volvió a Tránsito la potestad de ordenar los estacionamientos en el centro ya que la anterior gestión había creado una Dirección que se encargaba de las tarjetas. “Es necesario volver a concientizar a los conductores para mejorar el tránsito”, reflexionó Zamora. Sencilla historia Roberto perdió su carné de conducir hace cerca de 10 años. Ahora se encontró, por una razón de fuerza mayor (perdió su trabajo y ahora le queda la moto para hacer changas) con que tenía que volver a sacarlo. En la disparatada recepción en donde se tramita el carné (Alem 826) recibió con agrado la noticia de que “si ya tenías el carné sólo debés traer el examen de aptitud visual y las fotocopias de la primera y segunda hoja del DNI”. La explicación de la simpática señora obvió el tema de la plata porque está bastante claro en el folleto informativo: 67 pesos por única vez. Ahora, Roberto cuando hizo el carné hace 10 años, andaba medio descarriado y tuvo algunos inconvenientes para sacar el certificado de buena conducta.En aquellos años realizó algunos “arreglos”, lo consiguió y siguió con el trámite. Ahora no se lo volvieron a pedir. Es como que el Estado confía en que se anda portando bien. Tampoco le pidieron exámenes para saber cómo anda de salud. El municipio volvió a confiar en su palabra. Las chicas que reciben los papeles le dieron un pequeño formulario en donde debía tachar sí o no. ¿Tiene diabetes? Roberto puso que no pero en realidad nunca se hizo un estudio para saber cómo está el nivel de azúcar en sangre. El sistema es bastante arcaico, tanto que nadie le preguntó si sabe leer y escribir. Se entiende que sí, pero lo que no se descuenta es que conozca las señales de tránsito. Son decenas de miles de paranaenses que no saben qué hay que hacer cuando el cordón de la vereda está pintado de amarillo, por ejemplo. Entonces, Roberto sacó el número, se sentó en una silla medio rota y esperó que una de las chicas grite (si gritan) 27. Llevó los papeles, llenó otros, le dieron más formularios y lo mandaron a pagar a una caja en donde el cajero no habla. Volvió, entregó el sellado lo invitaron a sacarse una foto y en media hora le dieron el carné.