E
l número de asistentes al carnaval fue récord, como así también el alto porcentaje de alojamiento, de asistentes a las playas y a las siete fiestas populares que hubo el fin de semana, donde se registró un ingreso de 67.000 vehículos a la provincia. Miles de personas asistieron a diversos atractivos que ofrece Entre Ríos, generando un movimiento virtuoso desde el punto de vista económico. Miles de turistas eligieron Entre Ríos como destino en la primera semana de 2012. En este marco, la temporada estival arrancó con excelentes perspectivas para el sector turístico y económico. La provincia ofrece diversos atractivos para seguir captando visitantes de todo el país. Sumado al encanto a las playas, Entre Ríos cuenta con una amplia agenda de fiestas populares, propuestas culturales y el despliegue de los carnavales que acaparan la atracción de la gente. Durante el fin de semana se registró un ingreso de 67.000 vehículos a la provincia. Entre ellos, 20.000 accedieron por el Túnel Subfluvial, 14.000 por el enlace vial Rosario-Victoria, 32.000 por el puente Zárate-Brazo Largo y 1.000 por otros accesos a Entre Ríos. Fiestas populares Hubo diversas actividades en distintas localidades y regiones entrerrianas, en todos los casos con concurrencia multitudinaria. En este marco, más de 20.000 personas llegaron a Diamante para participar en la 41° edición del Festival Nacional de Jineteada y Folclore. El río, el complejo Turístico Valle de La Ensenada y el Parque Nacional Pre, Delta fueron los principales destinos elegidos por los visitantes. A la primera noche del Festival concurrieron los ministros de Comunicación y Cultura, Pedro Báez; y de Turismo Hugo Marso. “Hay que apostar al desarrollo y promoción de este tipo de actividades”, dijo el titular de la cartera de turismo. También el secretario de Turismo, Raúl González, visitó la ciudad y consideró “espectacular” la nueva edición del festival. “Este tipo de eventos son muy positivos para reflejar nuestra cultura y es doblemente valioso porque se da en los pueblos como Diamante, La Paz , o Santa Elena”, expresó y agregó: “Diamante fue el pionero y tiene un Festival que crece día a día”. Desbordada en su capacidad, la ciudad debió derivar gente a Libertador San Martín, Crespo y Valle María. Hoteles, cabañas, campings, escuelas y casas particulares, albergaron a más de 20.000 personas.