E
n la última década se presentaron 86 denuncias contra funcionarios judiciales entrerrianos en el Jurado de Enjuiciamiento, un promedio de alrededor de nueve por año. Del total, sólo dos causas llegaron a juicio, ya que el resto fue desestimada por carecer de fundamentos. Los jueces de Instrucción lideran el ranking de las presentaciones. En segundo lugar, se ubican los magistrados y funcionarios del fuero de Familia y Menores. El tercer puesto es para los jueces Civiles y Comerciales, mientras que los menos denunciados son los magistrados laborales. A la mayoría les atribuyen fallas administrativas o supuesta falta de imparcialidad. No hay presentaciones por casos de coimas o delitos comunes. Los denunciantes en su mayoría son abogados penalistas y de Familia. Si bien la capital entrerriana concentra la mayor cantidad de camaristas, jueces, fiscales y defensores, el mayor caudal de denuncias provienen del interior de Entre Ríos. Funcionarios judiciales consultados coincidieron en explicar que el fuero Penal y de Familia son los más cuestionados porque hay cuestiones muy sensibles en juego. “De todas maneras, investigamos todas las denuncias, no rechazamos porque sí a ninguna” dijo a uno de los miembro del Jurado. Diez años de presentaciones En 2001 se efectuaron 16 denuncias contra funcionarios judiciales. Entre las acusaciones se encuentra la realizada por la Sociedad Rural Argentina (SRA) contra el ex agente fiscal de Feliciano, Néstor Castría, quien fue destituido. No obstante, la última denuncia que prosperó y llegó a audiencia oral fue la ejecutada contra el juez multifueros de Feliciano Gabriel Emir Artero, quien fue absuelto de culpa y cargo. La cantidad de denuncia varía mucho de un año a otro. Por ejemplo en 2001,2003 y 2004 se superó la docena de presentaciones. Mientras que 2011 se perfila como el año con menos denuncias de los últimos 10 años con solo dos presentaciones, que ya fueron desestimadas. Las denuncias no tienen un tiempo estimado de tramitación, explicaron desde la oficina de Jury. Hay causas que superaron los cuatro años hasta que fueron resueltas. Cómo y en dónde denunciar Las presentaciones contra un funcionario sujeto a Jury se realizan en el segundo piso de Tribunales –la sede natural del Jurado es el Senado– pero como el secretario es del Poder Judicial, la oficina se traslado a ese lugar. Allí, si la persona no tiene asistencia letrada, presenta la denuncia y firma adelante del personal encargado del área. Desde ese momento se inicia la primera etapa, que incluye el descargo del denunciado. En caso de continuar la causa, el jurado es convocado a votar. Se cumplieron seis años de la última destitución en la Justicia En febrero de 2005 fue la última vez que un funcionario judicial fue destituido de su cargo en Entre Ríos. En aquella oportunidad, el ex agente fiscal de Feliciano, Néstor Castría fue acusado de irregularidades en el desempeño de sus funciones. La denuncia la impulsó la Sociedad Rural de Feliciano que advirtió sobre posibles irregularidades del fiscal a la hora de atacar el delito de abigeato en el Departamento. El fallo del jurado de enjuiciamiento fue dividido. La mayoría del Jury dio por probado los hechos que motivaron su enjuiciamiento, básicamente a partir de las contundentes pruebas aportadas por los testigos. El entonces procurador general del STJ Daniel Morales, acusó al fiscal de cinco de los 12 hechos que se le imputaban. Luego de realizar un detallado repaso por cada uno de los delitos en los que habría incurrido Castría, el procurador solicitó la destitución del fiscal por falta de idoneidad para ejercer sus funciones como agente fiscal. Argumentó que “en la mayoría de los casos se lo acusa de impericia y falta de atención. De tener actitudes reñidas con la moral y la ética”, y subrayó: “Es necesario contar con una buena reputación para ejercer sus funciones, algo de lo que él careció”. Más adelante indicó que “quedó evidenciado que muchas condiciones de virtuosidad en el accionar judicial de Castría no son dables de apreciar en su proceder cotidiano”. Además mencionó la sanción disciplinaria que recibió un juez que protagonizara escenas de pugilato, como un antecedente mucho menos graves, en relación a las denuncias contra Castría por amenazas contra un policía; un problema con un abogado con quien se habría enfrentado a pedradas y el desafío a pelear por un motivo insignificante a un comerciante de Feliciano. Hace cinco años que una denuncia no llega a juicio El juez de Instrucción con competencia Civil y Comercial y Laboral Gabriel Emir Artero fue el último magistrado entrerriano juzgado y absuelto por el Jurado de Enjuiciamiento. Desde octubre de 2006 ninguna de las 22 denuncias formuladas contra distintos funcionarios judiciales llegó a juicio. Artero fue absuelto por el Jurado de Enjuiciamiento ante la falta de acusación del fiscal adjunto del Superior Tribunal de Justicia (STJ) Mario Perosi. En aquella oportunidad, el Jurado rechazó remitir los antecedentes del caso a la Superintendencia como había pedido el fiscal y adhirió a la absolución, ya que al no haber acusación fiscal está imposibilitado de emitir otro fallo. Artero fue juzgado acusado de falta de idoneidad en el cargo e ignorancia del Derecho y falta de vigilancia en el movimiento general de las secretarías a su cargo. Estas falencias se habían traducido en demoras injustificadas y desorden en la tramitación de los juicios, según la denuncia promovida por la abogada Gloria Camarano de Cabrera y que fue desestimada en el debate. Rosi solicitó la absolución. Sin embargo, el fiscal criticó la función de Artero al frente del Juzgado, pero aclaró que no puede ser destituido por sus resoluciones, ya que las mismas son opinables y discutibles.