E
l crimen tuvo como escenario el frente de la vivienda que habitaba Sandro Manuel Balbuena, de 20 años, a quien en la zona se lo conocía con el apodo de Colo. Balbuena apareció asesinado con una puñalada en el pecho y las primeras versiones acercadas por fuentes policiales, enmarcadas en el seguimiento que se comenzó a hacer del caso, hablan de un posible ajuste de cuentas del que podrían no ser ajenos algunos sujetos del mismo entorno de la víctima, que habrían intentado –suponen- cobrarse una deslealtad ocurrida hace pocos días atrás. Según los investigadores, la semana pasada, Colo Balbuena y otros tres sujetos con los que solía reunirse, fueron hasta el barrio La Milagrosa, donde estuvieron a punto de mantener un enfrentamiento con una bandita a la que en la zona se la identifica como "Los Rosarinos". Ante la posibilidad de verse superados y temiendo una inminente situación de extrema violencia, se comenta que Balbuena optó por salir corriendo y lo siguieron otros dos más, pero uno de los integrantes de su grupo cayó en manos de los agresores del barrio La Milagrosa, padeciendo una feroz golpiza y sin lograr que los que huyeron regresaran a ayudarlo. Al parecer, la pista de los detectives está fundada en que desde ese momento nació un encono contra Balbuena y posiblemente una vendetta, al haberse roto los códigos de cubrirse las espaldas. Hasta anoche sólo se mencionaban algunos nombres anotados en el borrador de los investigadores del homicidio, pero por el momento, la Justicia no había ordenado la detención de ninguno de los que están en la mira y que tendrían sobrados antecedentes policiales.