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e la redacción de INFORME DIGITAL El Doctor Adrián Burioni (MP 10224), especialista en temas relacionados a la salud en radio f5, habló sobre el transplante de órganos. Sobre el tema dio, para comenzar, una definición clara: “el transplante de órgano es eliminar un órgano de un paciente, que está dañado y que no tiene posibilidad de recuperación, por uno que está sano”. “Está el transplante de órganos propiamente dicho que es sacar un órgano completo de un paciente, este es muy difícil porque de mil fallecidos solo se pueden realizar cinco transplantes por la complejidad que supone”, precisó y agregó que estas dificultades aparecen porque “el paciente tiene que haber fallecido dentro de una terapia intensiva para que artificialmente, los órganos se mantengan en forma aunque el paciente esté muerto”. Cabe aclarar que “los órganos trasplantables son el riñón, hígado, corazón, pulmón, páncreas e intestinos”, pero “se escucha seguido sobre el transplante de córneas, huesos y articulaciones”, sin embargo hay que diferenciar ya que “esos son transplantes de tejidos y en este caso el paciente pueden pasar seis horas desde su fallecimiento”, es decir, pudo morir en el lugar de un accidente, por ejemplo o en su casa. En este tipo de ablaciones “se pueden extraer huesos, válvulas cardíacas, córneas, estas incluso pueden donarse en el mismo domicilio donde la persona fallece, incluso en la sala de velatorio, a esto muy poca gente lo sabe, llamando al Cucaier (Centro Único Coordinador de Ablaciones e Implantes de Entre Ríos) o al Incucai (Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante) y dando aviso, ellos mandan a los especialistas y se practica la extracción”, también el galeno relató que “se pueden donar las articulaciones”, y claro está, “todo mejora de una manera increíble la vida de los pacientes”. “Hay un tercer tipo de transplante de células hematopoyéticas, también conocido como el de médula ósea y aquí el donante está vivo”, que es la diferencia más significativa. Con las ablaciones aparece “una pregunta que siempre se realiza” y que tiene que ver con “cuándo se puede realizar una donación de órganos, si el paciente debe morir o cómo lo debe manifestar”, al respecto Burioni consideró que “no necesariamente un paciente debe estar muerto para donar un órgano. En la Argentina la legislación vigente permite la donación de células hematopoyeticas para tratar enfermedades sanguíneas como pueden ser los linfomas. Uno va y hace la donación, es similar a donar sangre. Además se puede donar, como dije, la médula ósea”. “Otro caso donde se puede donar en vida es el caso de riñón e hígado, los dos únicos órganos que permite la legislación, que se donen en vida”, destacó el especialista en salud quién aclaró que “esta donación debe darse entre parientes directos y tiene que asegurarse que no va a producirse ningún daño al paciente sano”. “Actualmente está vigente lo que se conoce como la ley de donante presunto, es el paciente que expresa su deseo de donar o no hacerlo”, remarcó. Según Burioni “se manifiesta a través de un acta de expresión en el Incucai, firmándolo en los organismos judiciales, en el Registro Civil, cuando se va a votar, y para manifestarse en contra, se envía un telegrama en forma gratuita desde el Correo Argentino, expresando su deseo de no donar”.