A

ntes de fin de año se concretaría el juicio oral y público por el caso de presuntas coimas en el Senado de la Nación. En el proceso se investiga el presunto pago de 5 millones de dólares para la sanción de la ley de Reforma Laboral en el año 2000. Entre los implicados aparece el ex presidente, Fernando de la Rúa; el ex ministro de Trabajo, Alberto Flamarique; los ex senadores Remo Costanzo, Emilio Cantarero, José Genoud y Augusto Alasino, quien representara a la provincia y en esa época ostentaba el cargo de presidente del bloque del Partido Justicialista. El concordiense, junto a otros más de 300 testigos, deberá desfilar por el Tribunal Oral Criminal Federal Nº 3 de Capital Federal. Desconfiado Una vez al año se conoce alguna información sobre lo que se etiquetó en la esfera social y política como el caso de “la Banelco”. El último abordaje del tema fue el sábado en la edición de Clarín. Allí se anunció la inminente apertura del proceso oral y público. “Ojala lo hagan y terminamos con esto de una vez por todas. No nos pueden tener 11 años encartados e inhibidos en donde no podemos salir del país”. Del otro lado del teléfono, en Concordia, el que habla con El DIARIO es el ex senador Augusto Alasino. Durante toda la tarde de ese mismo sábado fue difícil encontrarlo; recién pudo atender a las 9 de la noche. Es que ese día anduvo de reunión en reunión porque era inminente la definición de la candidata a intendente de esa ciudad por el Peronismo Federal, espacio que conduce Jorge Busti y que el ex senador trabaja ahora. Alasino ya suponía por qué tema era la llamada. “No hay que confiarse. Yo no descartaría que esto no se haga y siga dando vueltas para usarlo como presión”, advierte Alasino. Y agrega: “Esto se utiliza políticamente”. Más adelante cuenta que a ha “declarado varias veces” y cuenta que “la última vez fue hace tres años”, precisa. “Cada tanto se mueve la causa. Igual estoy absolutamente convencido de que no va a haber culpables porque todo lo que se dijo es absolutamente mentira”, afirma en referencia al testimonio del “arrepentido” ex secretario parlamentario, Mario Pontaquarto, quien confesó haber llevado el dinero de las coimas a los senadores implicados. Hipótesis Para Alasino la causa de la Banelco “la armó el entorno de los Cavallo boy que encabezaba Alberto Fernández con la consigna de cargárselo a (ex presidente Fernando) De la Rúa y justificar el asalto al poder que le hicieron”, deduce. “Nosotros éramos el pato de la boda. A De la Rúa lo echó (Eduardo) Duhalde ante la pasividad absoluta de los radicales”, narra y revela que una vez se lo dijo a Raúl Alfonsín y que el ex presidente –por entonces senador– le contestó: “Qué quiere que le diga, si no se dejaba ayudar”. En todo momento el concordiense insiste y repite en que “el hecho es inexistente, está inventado” y que “esto estuvo todo armado para cargárselo a De la Rúa”. Sin expectativas, Alasino espera que lo convoquen. Cada tanto dice verse con sus pares con los que compartía el Senado. Encarará el juicio sin un abogado que se encargue de la defensa. “Me pedían 300 mil pesos, por eso determiné tener un defensor oficial. El ex presidente tiene su abogado personal”, relató. Conocidos. Es posible que Alasino se encuentre con viejos amigos. Por el Tribunal desfilarán como testigos Carlos Menem, Eduardo Duhalde y hasta Cristina Kirchner, aunque el riojano y la Presidenta podrán declarar por escrito, por la envestidura que ostentan por los cargos públicos que ocupan. El escándalo por el presunto pago de coimas significó el principio del fin del gobierno de la Alianza. De hecho, Carlos Chacho Álvarez renunció a la vicepresidencia por solicitar una investigación a fondo y la suerte de defensa que ensayó De la Rúa hizo de los implicados. El caso no tuvo grandes avances en la Justicia hasta la aparición del “arrepentido”, Mario Pontaquarto. El ex secretario parlamentario había afirmado en una entrevista concedida a la periodista María Fernanda Villosio, de la revista TXT, que las negociaciones con los senadores justicialistas se definieron en el despacho presidencial de Fernando de la Rúa, quien les habría dicho: “Arréglenlo con (Fernando de) Santibañes”, jefe de la SIDE. Testigos VIP Entre los testigos aceptados por el Tribunal se encuentra buena parte de la dirigencia política de la última década, como los ex senadores por Antonio Cafiero, Eduardo Bauzá, Graciela Fernández Meijide y Jorge Yoma, entre otros. También deberán concurrir a Tribunales personajes tan disímiles como el periodista de La Nación Joaquín Morales Solá y el chofer de la Secretaría de Inteligencia del Estado (Side) que habría llevado en su auto al “arrepentido” Mario Pontaquarto con el dinero de las coimas, Luis Alberto Ruidía. El sindicalismo también aportará testimonios. Según publicó Clarín este sábado, prestarían declaraciones el gastronómico Luis Barrionuevo, el camionero Hugo Moyano, el mercantil Armando Cavalieri, el ex titular de la CTA Víctor De Gennaro, el abogado de la CGT, el diputado Héctor Recalde y el taxista Omar Viviani. Entre los varios testigos desechados por el tribunal –la mayoría por sobreabundancia– se encuentra Marcelo Tinelli, pedido por la defensa de De la Rúa. Hace seis años el conductor hizo una parodia sobre el ex mandatario aliancista en el mismísimo despacho presidencial y con la anuencia del por entonces presidente Néstor Kirchner, quien participó del sketch.