L
os frigoríficos entrerrianos tienen las cámaras abarrotadas de pescado y en estos momentos no son favorables los precios internacionales, de allí la decisión de pagar a los pescadores 1,50 pesos por kilo en vez de 1,90 como venían abonando hasta ahora. Un matutino, en su edición del miércoles, publicó el malestar de los pescadores de Victoria ante una baja de más del 30% en el precio que las empresas les pagan por kilo de cada ejemplar. A raíz de las declaraciones, Claudio Ledesma, subsecretario de Planificación del Desarrollo y de la Producción de la Provincia detalló que se comunicó con los responsables de los frigoríficos, quienes explicaron la situación está ligada directamente al mercado internacional. El funcionario aclaró que si bien bajo el precio al que los frigoríficos adquieren el producto del río, los pescadores están trabajando bien. “En realidad, los pescadores reconocen que estas oscilaciones en los precios tienen que ver con el problema que existe a nivel internacional”, dijo el funcionario y reiteró que los mercados internacionales están frenados. Los países africanos están comprando, pero a un precio muy bajo que a los frigoríficos no les permite que les cierren los números. Entonces, los entrerrianos están esperando la apertura de los mercados colombiano y brasileño, que son los que sí están pagando buenos precios por el pescado argentino. “Al estar a la espera de estos compradores, los frigoríficos tienen las cámaras abarrotadas de pescado y por eso alquilan contenedores extras para poner más pescado y así continuar comprando unidades a los pescadores para que éstos no se queden sin vender, pero ponen como condición la baja en el precio de compra del pescado”, explicó Ledesma. Agregó que anualmente es un suceso que se da a nivel mundial. Antes de Semana Santa hay un bajón tanto en los precios como en la compra de pescados, y responde, ni más ni menos, a que durante los días previos y durante la celebración religiosa hay buen mercado y excelentes precios. Varios factores El funcionario entendió que la situación se da por la suma de varios factores, entre ellos, que “hubo mucho pescado y los pescadores no regulan lo que sacan para que la compra sea paulatina, sino que pescan lo que más pueden mientras haya quien le compre”. El gobierno analiza ahora los pasos a seguir para evitar que la restricción en la compra por parte de los frigoríficos, “no sea una restricción a cero”. Finalmente, el subsecretario pronunció que “los pescadores aguardan lo que suceda en los próximos días. Si la medida es transitoria no habrá ningún problema, pero si esto persiste en el tiempo desde el gobierno vamos a intervenir fuertemente”, aseguró el consultado. (UNO)