L
a anodina postal del centro paranaense en un domingo cualquiera muy probablemente se repita hoy y mañana. En los recuperados feriados de carnaval, se estima que la apertura de comercios para atender al público no superará el 15%, mientras que aquellos ubicados fuera del radio central prácticamente no abrirán. Si bien se anunció que los locales se dispondrían a ofrecer sus productos, en virtud que la llegada de turistas podría empujar a trabajar al menos medio día, lo cierto es que no todos serán los que lo hagan. La actividad será privativa del sector gastronómico –cada vez menos en la zona central ubicándose más hacia el sector del Parque Urquiza–, los divertimentos –que no son muchos–, y aquellas firmas que posean marcas de nivel o cuenten con una franquicia que les permita seducir a los visitantes con ropa que se elige y compra con la tranquilidad del tiempo de vacaciones. La principal barrera para los comercios no es otra que económica. De acuerdo a la legislación, el feriado se paga el doble de lo que normalmente se abona, por lo que si habitualmente la estructura de costos laborales llega al 17%, estos dos días implicarán un 34%. “Afortunadamente no cayeron en domingo, porque tendríamos que sumarle día no laborable”, ironizó un comerciante consultado, quien aseguró que no abrirá su negocios estos días. “Tengo la sensación de que los comercios abrirán más bien en la zona centro, y diría más, en la Peatonal. Y no lo harán todos, sino aquellos que puedan tener alguna oferta interesante para los turistas. Porque es cierto que difícilmente alguien salga a comprar un electrodoméstico mañana (por hoy) a la mañana. Creo que la idea de abrir dependerá de cada rubro y de las cuentas que haga comerciante, porque no puede haber una regla general para todos. En los días feriados, desde la desregulación (luego de la resolución del ex ministro de Economía Domingo Cavallo, luego ratificada por ley) no hay impedimento para abrir, pero tampoco puede ser compulsivo, y quedará en la decisión de cada empresario hacerlo o no”, sostuvo el director ejecutivo del Centro Comercial e Industrial de Paraná, Jorge López. Números Si el salario promedio de un empleado de comercio se ubica en los 3.500 pesos, se llega a la cuenta que un empleado cobra 116 pesos por día, pero como cada día cobra doble, ese número asciende a casi 235 pesos, valor que cada comerciante deberá pagarle a cada uno de sus empleados. Pero a esto hay que sumarle los gastos de electricidad –si es caluroso como se prevé hay que contemplar aire acondicionado–; movilidad y demás, lo que lleva a un prorrateo cercano a los 250 pesos. Con dos empleados ya se debe hablar de cerca de 500 pesos. De allí que dependerá de la rotación que tenga el negocio y las posibilidades de satisfacer la demanda de los turistas que se tome la decisión, porque si se posee un negocio sustentado en una franquicia de ropa importante y con alto margen, vender una campera puede significar los costos del día, pero en la mayoría de los casos esto no sucede. “Para muchos comerciantes, teniendo en cuenta que se ha incrementado el número de feriados nacionales en el año y llegaron para quedarse, abrir puede significar un buen posicionamiento para estos casos y que quede en la representación de la ciudad que esos días tal comercio permanece abierto”, reflexionó López, quien se inclina por pensar que el comerciante supeditará la decisión a una estricta relación costo–beneficio. Siguiendo con los números, y siempre hablando de promedio, se entiende que la rentabilidad del comercio se ubica en el 20% a 25%, por lo que para comenzar a ganar algo cada comercio debe vender por lo menos cuatro veces de su gasto: 1.000 pesos por cada empleado que requiera para abrir estos dos días. Siempre está la alternativa de que cada propietario se ponga al frente del negocio y de esta forma bajarían sustancialmente los costos y serán menos los riesgos y mayor la ganancia. En tanto, la comunicación en los hipermercados acerca del horario de apertura era diversa: mientras algunos anunciaban que sólo abrirían a la mañana, la gran mayoría lo hará todo el día ya que tienen para si que los habitantes que viven en los barrios toman las compras como un paseo y aprovechan ese día para llegarse con toda la familia y llenar el changuito. Sin actividad oficial En el sector oficial, todo queda a la espera del miércoles. Todos los ámbitos de la Administración Pública no tendrán actividad y estarán los edificios en silencio. Hoy y mañana no habrá bancos, pero se aseguró que los cajeros automáticos responderán con dinero cada vez que se lo solicite. No habrá recolección de residuos, y desde la Municipalidad, como sucede siempre en estos casos, solicita no sacarlos a la calle. (Fuente: El Diario - Por Gustavo Sánchez Romero)