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ace unos días un matutino entrerriano, y otro medi oque se hizo eco de la noticia, publicaron: “Procesaron a un abogado que agredió a una jueza”. Esto motivó un pedido de aclaración por parte de la jueza Viviana Edith Murawnik, esposa del protagonista del episodio narrado y mencionada en el artículo en cuestión. “El procesado por amenazas y lesiones leves tiene a su mujer como titular de un Juzgado. En los pasillos de Tribunales acusan al presunto agresor y a su esposa de manejarse con malos modales hacia sus colegas”, se afirmaba en la nota del 4 de marzo. La jueza Murawnik, niega su funcionamiento como “equipo en el mundillo de lo que es el fuero”; la magistrada considera errónea la información que alude a su desempeño, solicitando que dichas afirmaciones “deben tenerse como no realizadas” para dejar “a salvo su buen nombre y honor, personal, profesional y funcional”.