E
n el marco del Plan Exploratorio Argentina On Shore que la empresa YPF realizará en Entre Ríos, se dio a conocer un estudio que reúne toda la información técnica existente relacionada al relevamiento geológico regional y, específicamente, a la exploración de hidrocarburo. En un pormenorizado estudio preliminar se toma como punto de partida que –si bien no hay datos del subsuelo que permitan definir enfáticamente los sistemas petroleros potenciales– existen sí estimaciones a través de hipótesis. Es decir que hay pronósticos muy tempranos que surgen del conocimiento de la región de la Cuenca Chacoparaná. Y dentro de este bloque, se fija la atención en la geografía de Entre Ríos. Es así como se arriba a la conclusión de que existen dos tipos de roca madre, de edades paleozoicas, que podrían llegar a estar presentes en el sector que concita la atención del estudio. Precisamente, esta provincia mesopotámica se encuentra íntegramente en la mencionada Cuenca Chacoparaná-Paraná, que –con una superficie de aproximadamente 2 millones de kilómetros cuadrados– se extiende por el Noreste de Argentina y ocupa parte de Paraguay, Brasil y Uruguay. El informe apunta un dato a tomar en cuenta: en esa superficie hay 172 pozos exploratorios perforados, pero la única acumulación comercial –es decir la que se explota económicamente– es la de Barra Bonita en Brasil y corresponde a la producción de gas. Hasta el momento, en la parte argentina no hay antecedentes de descubrimientos, pero sí hay evidencias de hidrocarburos que alcanzan “niveles de rastros e impregnaciones de petróleo, y algunas manifestaciones de gas, en pozos de las provincias de Santa Fe y Chaco”. No es un dato menor. De lo que se trata es de observar qué expectativas se pueden tener para el territorio entrerriano. Las páginas se suceden con una vasta documentación que combina datos y nombres técnicos. Todo apunta a describir esta porción de la geografía, tanto en la capa superficial, como en las profundidades. Luego sí, se define lo que titulan los investigadores como “evaluación del potencial petrolero”. Es así como establecen los investigadores que “los hipotéticos sistemas petroleros considerados para la zona que nos ocupa se reunirían combinando eventos depositados durante el Período Paleozoico”. Y luego apuntan el nombre de las posibles cuencas petroleras: a) Carbonífero-Pérmico/Carbonífero-Pérmico, b) Paleozoico Superior/eventos ígneos K y c) Devónico/Paleozoico Superior. Para la formulación de las primeras observaciones, los investigadores toman en cuenta, entre los muchos elementos, los antecedentes exploratorios de la Cuenca Norte de la República Oriental del Uruguay adquiridos por YPF S.A. durante el año 2010 al ente estatal del vecino país: Administración Nacional de Combustibles, Alcoholes y Portland. “YPF adquirió al Ente Estatal ANCAP de Uruguay, información geológica de pozos, líneas sísmicas y datos analíticos de niveles generadores para ser proyectados hacia nuestro país y poder reconstruir la geometría y conformación de la cubeta sedimentaria”, revela. Y no sólo eso. También incorpora las “observaciones obtenidas por YPF a partir de los años 30, provenientes de métodos potenciales, tal el caso –afirma el escrito– de la gravimetría, de sísmica de refracción, datos de pozos perforados para el abastecimiento de agua en las diferentes provincias e información aportada por técnicas geoeléctricas utilzadas en la prospección de acuíferos termales”. Según se indicó desde la Dirección de Minería y la Secretaría de Energía –las dos áreas del gobierno provincial que trabajan en la coordinación de las tareas–, la semana anterior personal de la gerencia de exploración de YPF y técnicos de la Universidad de Buenos Aires, junto al director de Minería de la provincia, efectuaron distintos relevamientos en aguas termales. Las muestras tomadas para ser analizadas y cuyos resultados se espera estén en sesenta días aproximadamente, fueron realizadas en Federación, Concordia, Villa Elisa, Villaguay, Basavilbaso, María Grande y Diamante. A entender de los técnicos estas muestras apuntan a detectar la existencia de algunos elementos como podría ser partículas o gas en el agua que sirva para determinar la posible existencia de hidrocarburos en el subsuelo de la provincia. Además, se actualizó la base de datos geoquímica que posee la compañía a partir de nuevos informes de laboratorio efectuados. “Se cuenta a la fecha con más de 700 testimonios sobre características de rocas madre analizadas a partir de recortes de terreno provenientes de los sondeos exploratorios existentes”, revela el estudio. El trabajo estuvo a cargo de un equipo liderado por Ricardo Manoni e integrado, además, por María Emilia Reinante, Gustavo Olivieri y Luis Cabanillas y se realizó en el marco del convenio denominado “Acuerdo de trabajo para el desarrollo de proyectos exploratorios de hidrocarburos”, firmado en febrero del año 2010 entre YPF y el Estado entrerriano, representado por el gobernador Sergio Urribarri. (Fuente: El Diario)