S

e acerca la navidad y pensar en entrar a una juguetería por los regalos de los niños hace doler el bolsillo. Según los especialistas, para este año los precios aumentaron hasta un 25% respecto al año pasado. Aún así, hay grandes expectativas del sector, que espera vender un 20% más. Según Miguel Faraoni, presidente de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete (CAIJ), los juguetes aumentaron un 16% sus precios en relación a las Fiestas pasadas, aunque también afirmó que "hay algunas empresas que subieron más". Desde la Asociación Argentina de Empresas de Juguetes y afines (Aadeja), el director ejecutivo de la entidad, Carlos Restaino, sólo se animó a decir: "No estamos en condiciones de decir si los juguetes van a aumentar. Nosotros estimamos que comparado con el año pasado, puede haber, a nivel comercial, un aumento del 15 o18 por ciento. Esta estimación está en base a los costos de producción. Pero es un dato muy crudo, muy genérico". En las jugueterías Desde las jugueterías más conocidas, último eslabón en el aumento de precios, reconocieron que para esta navidad los precios de sus productos estarán un 25% más caros. "Los juguetes están carísimos. Creo que prácticamente están un poco más de 50% que el año pasado. En todo lo que son los muñecos que hacen alguna actividad como dormir o hacer pis, antes salían $200 ahora salen $380 o más. Todo lo que tiene baterías o encastres es inalcanzable, está alrededor de $300. Las Barbies, que antes se podían conseguir a $90, ahora arrancan en $150. Lo mínimo que se consigue está entre $60 y $100. Los juguetes que te muestran en la televisión, que es lo que quieren los chicos, son inaccesibles. Habrá que caminar aún más para encontrar mejores precios. Yo pensé ir a Once, pero tenés que comprar mayorista", dijo Nora Faciano, empleada de oficina que recorrió varias jugueterías de Belgrano para comprarles el regalo de navidad a sus dos hijas de 5 y 7 años. Sin embargo, la industria del juguete tiene buenas expectativas para esta Navidad. "Las ventas vienen reputando año a año, aunque varían, porque no son parejas para todas las zonas, ni para todo el país. En algunas partes se vendió más del 20%, y en otras menos, pero en general, tanto los juguetes nacionales como los importados se vienen vendiendo bien. La industria viene invirtiendo en tecnologías y nuevos productos", dijo Faraoni a este medio. Restaino remarcó la producción nacional y se mostró disconforme con la oferta de productos importados. "La gente va a encontrar variedad y cantidad. Aunque no hay la cantidad que nosotros pretendíamos, no va a escasear. Más allá de los procedimientos y las dificultades para importar, que no permitieron importar la cantidad que se pretendía, no prevemos faltantes para la navidad", señaló. Faraoni consideró que 2010 fue "un año muy positivo" y comentó que "a la hora de elegir qué juguetes comprar, el consumidor se inclina por aquellos que tienen licencia de primera línea o los personajes de moda que más espacio tienen en televisión, aunque los clásicos como muñecas, juegos didácticos o de mesa también tienen su lugar en el árbol de Navidad". Sector industrial "El sector industrial juguetero ha cerrado un año positivo a pesar de la crisis mundial que sufren otros mercados: las inversiones en activo fijo ascendieron a $ 25 millones y se han creado 600 nuevos puestos de trabajo", destacó el titular de la CAIJ, y pronosticó que "de continuar la política industrial que favorece el desarrollo de nuestro sector, se prevé una inversión similar para 2011". Además, indicó que este año colocaron en el mercado 400 nuevos productos, entre ellos, juegos de mesa, juegos didácticos y muñecas para chicos de entre 2 y 7 años. "Este paso es muy importante para la industria nacional del juguete, porque refleja el crecimiento sostenido que viene teniendo el sector, lo que se traduce en más y mejor calidad de productos con múltiples ofertas y un mercado en crecimiento, para pensar, en un mediano plazo, posicionarnos en el exterior", dijo Faraoni. Según la CAIJ, la industria nacional tiene el 30% del mercado y proyecta alcanzar el 50% trabajando no sólo con las ventajas de las barreras a la importación. "En esta industria somos mayoritariamente Pymes y no tenemos espalda financiera para comprar pagando por adelantado la materia prima y vendiendo a 90 días, pero hemos encontrado como salida para competir la creatividad y el diseño. El modelo de copiar productos importados que se dio tanto en el pasado, no funciona más. Hoy los jugueteros que quedamos en pie tenemos que sumar nuevos productos y calidad para poder competir", agregó. (Ana Falbo. lanacion.com )